- López Obrador señaló que Carlos Salinas de Gortari se dedicó a entregar los bienes de la nación a sus allegados.
- La desigualdad, en lo económico y social, quedaron fuera del centro del debate, por eso no se hablaba de corrupción, insistió.
El presidente Andrés Manuel López Obrador calificó a Carlos Salinas de Gortari como “el padre de la desigualdad moderna”, al destacar que se dedicó a entregar los bienes de la nación a sus allegados.
El actual mandatario recordó que en 20 días el expresidente entregó Banamex y Bancomer a los empresarios, y en un año, todas las instituciones financieras como parte de un proceso en el que participó el entonces secretario de Hacienda, Pedro Aspe, y su hermano Raúl Salinas.
Agregó que luego el ex presidente Ernesto Zedillo entregó los ferrocarriles, como 25 mil kilómetros de líneas, pero no el ferrocarril del sureste. Por el abandono en que estaba el sureste ni siquiera les intereso para robar, puntualizó.
Fiel a su discurso, López Obrador destacó que la política neoliberal promovió en el mundo, “para saquear a sus anchas, los llamados nuevos derechos, y se alentó mucho, incluso por ellos mismos, el feminismo, el ecologismo, la defensa de los derechos humanos, la protección de los animales, todas causas muy nobles, pero el propósito era crear todas estas nuevas causas para que no reparamos, para que no volteáramos a ver que estaban saqueando al mundo”.
Señaló que temas como la desigualdad, en lo económico y social, quedaron “fuera del centro del debate, por eso no se hablaba de corrupción. Se dejo de hablar de explotación, de opresión, clasismo, racismo”, y agregó que agencias internacionales que apoyaban el neoliberalismo “que es el modelo del pillaje, donde corporaciones se apropian de bienes nacionales del pueblo, y estas mismas corporaciones financiaban a estos grupos”.
Indicó que hay colectivos ambientalistas que se oponen al Tren Maya, “como las asociaciones de Claudio X. González, imagínense a veces ni siquiera es un asunto perverso, no, un profesional que estudia biología, medio ambiente, filosofía, derechos humanos, siente que es una causa justa, y es su causa fundamental y se dedica a eso”.
La diferencia con nosotros, explicó el mandatario federal, es que desde el principio dijimos “esto esta mal por la corrupción y si acabamos con ella vamos a lograr que haya igualdad, si la hay vamos a proteger los derechos humanos y si se acaba con la corrupción, vamos a acabar con la violencia, pero hay que cambiar al régimen corrupto”.
En esa lucha, estas asociaciones de la llamada sociedad civil, dijo, “no votaban, no estaban con nosotros, la mayoría, porque no estaban pensando en transformar, si acaso se quedan en el regodeo del análisis de la realidad, pero como vas a estar analizando nada más la realidad, más cuando se trata de una realidad de opresión, de injusticas, de privilegios, esas son nuestras diferencias de fondo”.