Las elecciones celebradas este 5 de junio en seis Estados de la República Mexicana, fueron una llamada de alarma para el Gobierno Federal, donde los resultados en lugar de 6 de 6 que proclamaban a todos los vientos los morenistas, se convirtió en 3 de 6, siendo un factor que la gente ya no cree en los discursos mañaneros y sobretodo que siguen viendo que la economía en lugar de crecer, suben los precios de la canasta básica y servicios donde el sueldo promedio de los mexicanos no alcanza para el 80 por ciento de las familias mexicanas, que ven sus posibilidades de crecimiento estancadas.
Mientras, el Presidente del Partido Acción Nacional, Marko Cortés, afirma que se ganó en los Estados de Aguascalientes, Durango y Tamaulipas; en Partido Morena con Mario Delgado Carrillo, parece que se desinfla, solo en Hidalgo, Quintana Roo y Oaxaca obtendrían el triunfo. Si estos resultados son al final decretados oficialmente, sería un indicador que en el 2023 y 2024 dónde Morena podría seguir sufriendo derrotas en las urnas.
El año pasado Morena se impuso en 11 de 15 elecciones. Es decir, en términos proporcionales ganaría dos de tres estados en contienda, aunque el año pasado supuso una sorpresa porque había muchas más elecciones cerradas o competidas.
Cerca de 12 millones de mexicanos fueron a las urnas para renovar las gubernaturas de los estados de Quintana Roo, Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes, Tamaulipas y Durango, así como 39 ayuntamientos y 25 diputados locales. El partido oficialista Morena aspiraba consolidar su poder territorial en esta cita a la que llegaba como favorito en las encuestas, mientras que sus rivales opositores demostraron que aún pueden plantar cara al movimiento hegemónico liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
El PAN parece defender bien sus plazas. Como lo hizo en Aguascalientes en esta elección, lo hizo en Chihuahua y Querétaro en 2021, donde ganaron también candidatos panistas fueran solos o en coalición. El PRI, por otro lado, perdió ocho estados. Es irónico que el único territorio que podrían ganar ahora, Durango, que está gobernado por un panista. Es decir, estaría recuperando. Si llegara a ganar el aspirante del PRI en Durango, sería la única victoria para este partido entre 21 votaciones, 15 en 2021 y seis en 2022.
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