Cambio climático exacerba las guerras y el Consejo de Seguridad debe afrontarlo: ONU

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El cambio climático es un amplificador y un multiplicador de crisis, advirtió el Secretario General de la ONU ante el Consejo de Seguridad.

“Cuando el cambio climático seca los ríos, reduce las cosechas, destruye la infraestructura crítica y desplaza a las comunidades, exacerba los riesgos de inestabilidad y conflicto”, afirmó Antonio Guterres durante una reunión convocada por el Primer Ministro del Reino Unido, Boris Johnson, para discutir la relación entre clima e inseguridad mundial.

Guterres citó un estudio del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo que encontró que ocho de los diez países que albergaron las mayores operaciones multilaterales de paz en 2018 estaban en áreas altamente expuestas al cambio climático.

“Los impactos de esta crisis son mayores donde la fragilidad y los conflictos han debilitado los mecanismos de supervivencia; donde la gente depende del capital natural como los bosques y las pesquerías para su sustento; y donde las mujeres, que soportan la mayor carga de la emergencia climática, no disfrutan de los mismos derechos”, explicó.

El Secretario General puso como ejemplo a Afganistán, donde el 40% de la fuerza laboral se dedica a la agricultura, y la reducción de las cosechas empuja a las personas a la pobreza y la inseguridad alimentaria, dejándolas susceptibles de ser reclutadas por bandas criminales y grupos armados.

También citó a África occidental y el Sahel, donde más de 50 millones de personas dependen de la cría de ganado para sobrevivir. Allí, los cambios en los patrones de pastoreo han contribuido al aumento de la violencia y los conflictos entre pastores y agricultores.

Mientras tanto, en Darfur, la escasez de lluvias y las sequías recurrentes están aumentando la inseguridad alimentaria y la competencia por los recursos, ya se está viendo el resultado. Las consecuencias son particularmente devastadoras para las mujeres y las niñas, que se ven obligadas a caminar más lejos para recoger agua, lo que las pone en mayor riesgo de sufrir violencia sexual y de género.

Los vulnerables son los que más sufren

“La vulnerabilidad a los riesgos climáticos también se correlaciona con la desigualdad de ingresos. En otras palabras, los más pobres son los que más sufren”, dijo, advirtiendo que a menos que se proteja a los más expuestos y susceptibles a los impactos relacionados con el clima, es de esperar que se vuelvan aún más marginados y que se refuercen sus problemas.

Guterres alertó que los altos niveles de desigualdad, aumentada el cambio climático, pueden debilitar la cohesión social y dar lugar a discriminación, chivos expiatorios, tensiones y disturbios, aumentando el riesgo de conflicto.

El cambio climático aumenta el desplazamiento

“Los que ya se están quedando atrás, se quedarán aún más atrás. La alteración del clima ya está provocando el desplazamiento en todo el mundo”, recalcó el titular de la ONU.

Y es que, en algunas pequeñas naciones insulares del Pacífico, comunidades enteras se han visto obligadas a trasladarse, con terribles consecuencias para sus medios de vida, cultura y patrimonio.

“El movimiento forzado de un mayor número de personas en todo el mundo aumentará claramente el potencial de conflicto e inseguridad más allá de su sufrimiento”, advirtió.

Guterres recordó que cuando era Alto Comisionado para los Refugiados, compartió con personas que habían sido desarraigadas por el impacto del cambio climático en el Cuerno de África, Darfur, el Sahel y otros lugares.

“Al escuchar sus historias, comprendí el profundo sufrimiento y el trauma de las familias que se vieron obligadas a abandonar sus hogares y tierras que habían sido suyos durante generaciones”, dijo.

Cuatro áreas de acción

El titular de la ONU describió un plan de cuatro puntos para abordar los riesgos específicos que plantea la crisis climática para la paz y la seguridad.

  1. Un mayor enfoque en la prevención a través de una acción climática fuerte y ambiciosa
  2. Acciones inmediatas para proteger a los países, las comunidades y las personas de los impactos climáticos cada vez más frecuentes y severos
  3. Adoptar un concepto de seguridad que ponga a las personas en el centro
  4. Fortalecer las asociaciones dentro y fuera del sistema de las Naciones Unidas