La emoción es enorme, las dudas saltan por cientos, pero la espera ha terminado. Las campañas electorales empezaron y con ellas, toda una temporada que nos dará para tirar ríos de tinta y bytes para revisar lo que hacen los candidatos y sus partidos, pues si para algo sirven nuestros políticos es para lucirse, así sea hasta el ridículo y con cargo al presupuesto.
Quién será el primero
Varias son las características que apuntan para darse en las campañas electorales que ahora inician. Una de esta es acerca de los candidatos que buscarán ganar el voto ciudadano, pero copiando spots, lemas de campaña o la imagen de algún otro partido, aunque no sea mexicano.
En ocasiones anteriores vimos cómo se imitó la imagen que utilizó Barak Obama en su primer, y triunfal, intento por ocupar la Casa Blanca, por lo que no será una novedad que veamos a alguno de los abanderados copiar algún esquema importado de otras latitudes.
Otra característica a la que nos tienen acostumbrados nuestros políticos es a las filtraciones que, ya sea en audio o en video, buscan descarrilar a sus adversarios. Si bien en Nuevo León ya tuvimos un video en el que exhiben a la candidata de Morena a la gubernatura con relación a cierta secta y su líder, algo que antes negó, esto no es propiamente una filtración por tratarse de material público, aunque la expriísta ya quedó marcada como mentirosa.
Así, habrá que esperar quien exhibe la primera grabación obtenida ilegalmente para desacreditar a un candidato y reducir sus posibilidades de triunfo. Recuerden que, desde hace años, viene siendo costumbre que las campañas sean la ocasión para dar a conocer este tipo de materiales.
Otro aspecto que esperamos conocer pronto, es el del ridículo en campaña. Algunos representantes de partido no se pueden permitir dejar de llamar la atención y buscan la manera de obtenerla, a pesar de que no se les ocurra algo mejor que un spot en el que cometen errores, un discurso mal pronunciado o un evento en el que hacen gala de su falta de pericia política.
Si bien Samuel García, de Movimiento Ciudadano, va a la cabeza en la generación de expectativas en este rubro, podría surgir algún otro candidato que le arrebate el primer lugar.
Asimismo, estamos también a la espera de conocer quién hace la propuesta más tonta de toda la campaña. Si bien se trata de algo que pocos electores toman en cuenta, hay algunos candidatos que se esfuerzan por proponer algo que bien puede ser inviable, ya está hecho, no resolvería ningún problema, es copia de la que hizo otro candidato en otro país o es lo suficientemente absurda para en verdad considerarla, aunque también podría entrar en todas las categorías antes expuestas.
Cabe recordar que el actual gobernador de Nuevo León propuso cortarle la mano a los rateros, como para darnos una idea de por dónde vendrán este tipo de propuestas.
¿Qué candidatos se tirarán a la hamaca pensando que una foto con López Obrador es garantía de triunfo? Esto es algo que veremos en muchos de los abanderados de Morena, pues buscan repetir –a como dé lugar– el efecto que el ahora presidente impulsó con su campaña, sin considerar que ahora las condiciones son otras y que el ejercicio del poder, así sea el presidencial, causa desgaste y podría resultar contraproducente esta estrategia.
De todas maneras, veremos a los de Morena presumir sus fotos con el presidente, aunque él haya dicho que no se podrá usar su imagen.
También nos asalta la duda acerca de qué harán los candidatos de la oposición que ya no puedan criticar la corrupción del PRI, la mojigatería del PAN o las contradicciones del PRD, pues ahora son aliados de ocasión.
En anteriores campañas, muchos candidatos basaban sus discursos en atacar a sus adversarios políticos, pensando que señalar a los corruptos tricolores, a los mojigatos azules o a los contradictorios amarillos podrían ganar los votos necesarios para alcanzar el triunfo, pero ahora que van juntos la pregunta es a quien van a atacar, y no es que no tengan material para hacerlo, pues Morena basará su campaña en señalar al PRIAN y todo lo negativo que hizo, así que lo más probable es que veamos un duelo de acusaciones en donde el bostezo estará más que garantizado.
¿Qué tanto se confundirá el elector por tantas alianzas y políticos que cambian de partido más que de calcetines? La campaña que inicia tendrá como una de sus novedades la presentación de dos alianzas que buscan presentarse como la verdadera salvación del país.
La de Morena saldrá a recordarnos el mal que hizo el PRIAN y que ahora busca regresar a la época de privilegios, pero del otro lado mostrarán la ineptitud del gobierno morenista y la incongruencia de quejarse de un pasado que ellos mismos se encargaron de construir, como parte de lo que ahora combaten.
El problema es que ambas alianzas tienen razón y el elector no tiene hacia dónde hacerse, por lo que será interesante escuchar qué argumentos ponen sobre la mesa para sostener sus dichos.
