La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, destacó que la relación con Latinoamérica va mucho más allá del comercio y, pese a reconocer que a veces es complicada, aseguró que su Gobierno cree en el potencial de la región.
Harris fue una de las ponentes de la 51ª Conferencia anual sobre las Américas, organizada por la Americas Society/Council of the Americas, con las intervenciones de altos funcionarios del gobierno estadounidense y líderes de todo el hemisferio occidental.
El discurso de la ex senadora destacó las iniciativas del gobierno estadounidense para apoyar a la región frente la pandemia y en temas migratorios, pero destacó: “Por mucho esfuerzo que hagamos, no tendremos avances significativos si la corrupción persiste. Si persiste, será un paso adelante y tres atrás”. En un mensaje que hizo foco en los tres países del Triángulo Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador), remarcó: “La corrupción hace que las instituciones colapsen desde adentro. Impide que los niños se eduquen, que los negocios avancen, que los juicios sean justos”.
“En el Triángulo Norte, la corrupción evita que se den las condiciones para atraer la inversión. La corrupción inhibe la propseridad. Se estima que el costo global es un 5% del PBI global”, agregó.
A fines de marzo, el presidente Joe Biden ordenó que Harris se haga cargo de la crisis humanitaria en la frontera con México, ante el aumento de la llegada de inmigrantes que buscan solicitar asilo. “Ella es la persona más calificada para hacerlo (…). Cuando ella habla, habla por mí”, indicó Biden.
La vicepresidente explicó que el enfoque es mejorar las condiciones de vida en Centroamérica para que la gente no se vea obligada a abandonar sus hogares en busca de mejores oportunidades. “Queremos que encuentren esperanza en su hogar, atender los factores de raíz y las catástrofes que causan la migración”.
El evento ofrece una primera oportunidad para que los participantes escuchen directamente a la nueva administración Biden sobre su agenda política hemisférica y sus iniciativas para colaborar con los socios regionales para hacer avanzar a las Américas en 2021 y más allá.
La Conferencia de este año, titulada “Democrática, Próspera y Segura: Restablecer una asociación para el crecimiento sostenible” y coorganizada por el Departamento de Estado, destacará las prioridades del gobierno de Joe Biden hacia la política del hemisferio y los esfuerzos para reafirmar y fortalecer las asociaciones de EEUU con los países de la región.
“La fuerza de EEUU depende de la fuerza de todo el hemisferio Occidental. Nuestros destinos están entrecruzados. Eso es especialmente verdad para América Latina, uno de nuestros principales socios comerciales. Nuestra relación es compleja y en ocasiones ha sido complicada. Los latinoamericanos están escribiendo su propia historia. De ellos dependerá. Nuestro rol es leer esas palabras, tomarlas y ayudar como podamos mientras escriben su propio próximo capítulo”, indicó Harris en su discurso.
“De muchas maneras nuestros destinos están entrelazados, y esto es especialmente cierto con Latinoamérica, uno de nuestros socios comerciales que está creciendo más”, señaló la vicepresidenta.
“Y nuestra relación es mayor que el comercio”, siguió Harris, quien, no obstante, reconoció que es “compleja”, en incluso en algunas ocasiones “increíblemente compleja”.
“Imperativo” promover la democracia
En ese sentido, consideró que es ‘imperativo’ promover la democracia y el buen gobierno en la región, así como la prosperidad y la seguridad, e hizo hincapié en la lucha contra la corrupción en el Triángulo Norte -Guatemala, Honduras y El Salvador-, ya que mientras esta lacra persista, avisó, no es posible el progreso.
El Gobierno de Estados Unidos tiene interés en que haya una mejora de las condiciones de vida en esas naciones para que sus ciudadanos opten por quedarse en sus lugares de origen y no emprendan la migración hacia el norte.
Harris detalló que su Administración está centrada en abordar factores como los huracanes, la pandemia, la sequía y la inseguridad alimentaria, así como “las causas de raíz” de la inmigración, como la corrupción, la violencia, la falta de buen gobierno y la pobreza.
Pero por muchos esfuerzos que EE.UU. ponga en “frenar la violencia, proporcionar ayuda frente a los desastres, afrontar la inseguridad alimentaria… No haremos ningún progreso significativo si la corrupción persiste en la región”, remarcó.
Harris afirmó que la historia ha demostrado que cuando existe la corrupción un paso adelante supone dos pasos atrás, y lanzó una advertencia a El Salvador tras las destituciones de jueces de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y del fiscal general.
“Justo este fin de semana supimos que el Parlamento salvadoreño actuó para socavar la corte de mayor instancia de la nación’, comenzó la responsable estadounidense, quien recordó que un Poder Judicial independiente “es crucial” para una democracia sana y una economía fuerte.
“Debemos responder”, sentenció Harris.