- Las campañas de vacunación sigue desempeñando un papel crucial en la lucha contra la pandemia, por lo que el “aumento de la demanda es clave”, insisten.
- En América, Brasil ya comenzó a exigir en los puestos de frontera y en los aeropuertos el pasaporte de vacunación.
La introducción del certificado Covid digital ha provocado un aumento de la demanda de preparados entre la ciudadanía de países que tenían una cobertura de vacunación inferior a la media, según expone un estudio que publica este lunes The Lancet.
La investigación, desarrollada por el Centro Leverhulme de Ciencia Demográfica de la Universidad de Oxford (R.Unido), examinó datos de seis países y constató que la cartilla Covid propició en la mayoría un repunte en sus campañas de inmunización, si bien detectó diferencias entre ellos dependiendo de los niveles anteriores de cobertura y disponibilidad de vacunas.
Así, los modelos de estudio de los expertos indicaron que Francia, Israel, Italia y Suiza, “que partían con una cobertura de vacunas inferior a la media”, experimentaron un gran aumento en la demanda de preparados antes y después de la entrada en vigor del pasaporte digital.
Por contra, no detectaron cambios significativos en Alemania, donde la cobertura ya era alta, o en Dinamarca, donde el suministro de vacunas era limitado.
La principal autora de este trabajo, Melinda Mills, recordó en un comunicado que el avance de las campañas de vacunación “sigue desempeñando un papel crucial” en la lucha contra la pandemia de coronavirus, por lo que el “aumento de la demanda es clave” tanto para “proteger al individuo” como para “romper la cadena de infección en la comunidad”.
“Nuestro estudio es la primera evaluación empírica importante para determinar si el certificado Covid puede formar parte de esta estrategia”, destacó la experta.
En general, apuntó, los resultados demuestran que, ante la expectativa de que se impondrían restricciones, hubo un “repunte significativo” 20 días antes de la introducción del certificado, “lo duró hasta 40 días después”.
“Pero el grado existente de aceptación de la vacuna, las dudas sobre las vacunas, los niveles de confianza en las autoridades y la trayectoria de la pandemia fueron cruciales para su impacto”, precisó Mills.
Los autores también constataron que, tras la introducción de la cartilla digital, los aumentos en la vacunación fueron más significativos en el grupo de individuos menores de 30 años, respecto a los grupos de mayor edad.
En Suiza, por ejemplo, cuando las autoridades recurrieron al certificado para restringir la entrada en clubes nocturnos y eventos multitudinarios, el repunte en la vacunación solo se detectó en los menores de 20 años.
No obstante, cuando las restricciones se extendieron a todo el sector hostelero y de ocio, el aumento también se dio en los grupos de edades comprendidas entre los 20 y 49 años.
Los expertos indican que los datos sugieren que estas medidas son útiles para promover la vacunación entre ciertos grupos demográficos, aunque creen que es necesario efectuar más estudios para analizar otros factores, como el estatus socioeconómico y étnico, y determinar “a quien deben dirigirse los certificados” para elevar su eficacia.
En América, Brasil comienza a exigir pasaporte de vacunación anticovid en los aeropuertos
La Agencia Nacional de vigilancia Sanitaria (Anvisa) de Brasil comenzó a exigir en los puestos de frontera y en los aeropuertos el pasaporte de vacunación contra la covid a las personas que lleguen al país, acatando una decisión de la Corte Suprema y contrariando al presidente Jair Bolsonaro.
En un comunicado, el ente regulador sanitario indicó que la decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) era de carácter “inmediato” y “sin plazo de adecuación” y por eso la máxima corte del país “exige” de la Anvisa “evaluaciones puntuales” para los casos de los viajeros en tránsito que llegaron antes al país.
La Anvisa, además, indicó que aguarda la reglamentación interministerial en la que varias carteras, como las de Salud, Relaciones Exteriores y Defensa, entre otras, deberán definir las nuevas reglas.
La imposición del llamado pasaporte sanitario fue recomendada por instituciones como la Anvisa, la Defensoría Pública y el Tribunal de Cuentas de la Unión (órgano consultor del Congreso) tras la aparición de la variante ómicron, potencialmente más contagiosa y de la que ya se confirmaron por lo menos 12 casos en Brasil.
Sin embargo, Bolsonaro, uno de los gobernantes más escépticos frente a la covid, rechazó su implementación al alegar que la “libertad” de los individuos debe ser “respetada”, lo que generó una ola de críticas y llevó a que el partido Rede Sustentabilidade llevara una petición ante el Tribunal Supremo para exigir la medida.
El magistrado Luis Roberto Barroso acató el pedido y, a pesar de que el Gobierno alegó que el reciente ataque de “hackers” a la base de datos del Ministerio de Salud impediría implementar la medida, exigió el “cumplimiento” de la misma de forma inmediata.
Brasil acumula 616 mil 878 muertes y 22 millones 200 mil 953 contagios de coronavirus, que lo confirman como el segundo país con más víctimas mortales en el mundo por la pandemia y el tercero con más casos.