Que difícil ha de ser dormir con la preocupación de que al otro día se gire una orden de aprehensión. Resulta que en la estación del Metro “Los Olivos”,
Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo, las víctimas del colapso, acompañadas por Teófilo Benítez Granados, su abogado, informaron que el próximo 19 de abril tendrán listo su propio peritaje del accidente del pasado 3 de mayo que provocó la muerte de 26 usuarios. Nada de creer que todo se debió a “los pernos”.
Esto podría permitir formular nuevas acusaciones en contra de aquellos funcionarios que tuvieron a su cargo, desde la planeación del proyecto, hasta la construcción, mantenimiento y operación del Metro fijando su responsabilidad a cuatro de ellos, Marcelo Ebrard, Mario Delgado, Claudia Sheinbaum y Florencia Serranía.
El dictamen que presentarán busca castigar a los responsables y evitar la Impunidad y protección como ha ocurrido evidentemente con Florencia Serranía, ex titular del STC y también ex subdirectora de mantenimiento del propio Metro. Además, adicional al lamentable caso de la detención ilegal de Alejandra Cuevas, los deudos intentan demostrar la ineficiencia y complicidad política de la Fiscal Ernestina Godoy.
Los familiares de los fallecidos indicaron que “nosotros demostraremos con sus propios documentos, con sus propios análisis, que realmente estuvo corta la investigación, que estuvo mal la investigación, que sí está bien hecha la imputación a las personas que ellos tienen ahorita como imputadas, pero se les olvidaron muchísimos más atrás, entonces este peritaje es precisamente de lo que trata es esclarecer los hechos a los ojos de la ciudadanía y en especial de la propia fiscal”. Las indemnizaciones que Grupo Carso a entregado a los familiares resultan una humillación y una ofensa ya intentan reducir a silencio este criminal acto otorgando un millón de pesos por fallecido.
A Marcelo Ebrard le reclamarán su irresponsabilidad en los linchamientos casualmente en Tláhuac y haber cometido irregularidades en el diseño de los tramos de la Línea Doce, la compra de trenes no recomendados para esa obra y haberla inaugurado sin terminar.
A Claudia Sheinbaum le recordarán el desplome del Colegio Rébsamen y el haber protegido a Florencia Serranía después de varios accidentes fatales en los subterráneos del transporte público, el incendio en el centro de control maestro y el desplome en el elevado de Tláhuac.
Además del soporte técnico varios sobrevivientes a la tragedia exigen al Gobierno de la CDMX y a la Fiscalía respuestas claras y no caer en el juego sucio de que todo se debió a unas soldaduras o pernos defectuosos.
Las facturas Político/sociales de los mencionados como responsables son graves y más aún cuando después de un año no hay detenidos, consignados y nada se sabe de las carpetas de investigación.
Aún no la libran quienes hoy se exhiben como garantes de la honestidad valiente. La herida permanente que deja el fallecimiento de familiares permanece abierta y la omisión, silencio, mentiras y corrupción de las autoridades enardecen a una población que ya no está dispuesta a recibir groseras compensaciones para guardar silencio.
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