La izquierda lopezobradorista no está peleada con la inversión privada o al menos ya se dio cuenta de lo indispensable que resulta para el desarrollo del país.
Prueba de ello puede ser la Firma de Iniciativa Oaxaca que este miércoles concretaron el gobernador Salomón Jara Cruz y el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Francisco Cervantes, con la presencia del embajador de Estados Unidos de Norteamérica en México, Ken Salazar como testigo de honor, para apuntalar la inversión privada como complemento a los proyectos estratégicos que impulsa el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Concretamente en torno al Corredor Interoceánico.
La firma se dio días después de la primera prueba del tren interoceánico, lo cual puede reflejar que la puesta en marcha de éste era condición para cerrar el acuerdo de impulso a la inversión privada en la entidad oaxaqueña, prácticamente de manera específica en la zona comercial del corredor donde se proyectan alrededor de una decena de parques industriales.
Aunque oaxaqueños y oaxaqueñas esperan que el impulso a la inversión privada se extienda a todas las regiones de la entidad sin exclusión de inversionistas locales, que si bien se encuentran en desventaja con quienes poseen gran capital para el comercio y la industria a gran escala, también pueden aportar un granito de arena al desarrollo de Oaxaca y del país.
Con los frutos de la Firma Iniciativa Oaxaca, el gobierno de Salomón Jara se va a consolidar como el primero en potencializar el desarrollo del estado, amén del crédito que corresponde al presidente López Obrador por el impulso al Sur-Sureste del país, sobre todo respecto del Corredor Interoceánico.
Por cierto, dicen que el Corredor está llamado a convertirse en un muro migratorio de Estados Unidos, cuyo gobierno fomenta la inversión privada para la generación de fuentes de empleo donde se queden los migrantes provenientes de otros países desistiendo del sueño de ingresar a territorio gringo.
HARFUCH
Independientemente de que sea o no el ‘favorito’ de Claudia Sheinbaum, Omar García Harfuch tiene una cualidad indispensable en toda persona que aspire a contender por un cargo de elección popular: Conecta con la ciudadanía.
Caso sui géneris, porque esa cualidad es poco común en un mando policíaco como él que desde octubre del 2019 a septiembre de 2023 estuvo al frente de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, muy compleja en la materia.
Y, por decirlo de algún modo, es un policía profesional; tiene dos licenciaturas, una en Derecho y otra en Seguridad Pública, con estudios de especialización en seguridad en la Universidad de Harvard, en el FBI y en la Administración para el Control de Drogas (DEA).
Y tiene una vasta carrera policíaca: Fue jefe de departamento de la Policía Federal Preventiva de la Secretaría de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón escalando a diversos cargos en la misma corporación. En la administración de Enrique Peña Nieto, fue comisionado de la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República. Posteriormente, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, lo nombró jefe de la Policía de Investigación, coordinador de inteligencia en el gabinete de seguridad y luego Secretario de Seguridad Ciudadana.
Ejercer la carrera policíaca en diversos gobiernos de distintas filiaciones políticas, también es poco común. Cosa que puede ser una fortaleza o un punto débil, según los positivos y negativos en el desempeño de los cargos.
Generalmente un jefe policíaco termina repudiado o ignorado por la sociedad. Pero en el caso de Harfuch parece al contrario. Las encuestas lo ubican con el 40% en promedio en la preferencia electoral para la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, unos dos puntos arriba de Clara Brugada Molina, quien busca la postulación de Morena, lo mismo que Mario Delgado Carrillo, entre otros cuadros de la “4-T”.
Es incierto si Morena ve en Harfuch un símil de perfil de Peña Nieto: Joven y galán. Pero a sus 41 años de edad, Harfuch se perfila como el candidato de Morena para disputar el gobierno capitalino en las elecciones del 2024.
Además, porque si Morena atiende a la alternancia de género, debe ser para hombre la candidatura de este partido para la jefatura de gobierno de la Ciudad de México considerando que en la elección anterior postuló mujer.