- Vladímir Putin, valoró positivamente la cumbre con su homólogo estadounidense Joe Biden, y afirmó que “no hubo ninguna hostilidad”.
- Biden calificó como “productivo” el encuentro, en el que llamó a favorecer la cooperación entre ambos países frente al conflicto.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, mostraron regalaron al mundo la postal con el apretón de manos de su esperada cumbre de Ginebra, destinada a rebajar las tensiones entre ambos países y hallar algunos puntos de acuerdo.
Los dos responsables llegaron con minutos de diferencia a la Villa La Grange, un edificio del siglo XVIII ubicado en el corazón de la ciudad suiza, y fueron recibidos por el presidente suizo Guy Parmelin, que les deseó suerte en esta reunión que se prevé complicada.
Biden tomó la iniciativa y tendió la mano a Putin. “Siempre es mejor verse cara a cara”, dijo el mandatario estadounidense al inicio de esta cumbre, la primera con el líder ruso desde que llegó a la Casa Blanca en enero.
Putin, por su parte, dijo que confiaba en que la “reunión sea productiva”.
Putin llegó a Ginebra el miércoles al mediodía, media hora antes del inicio de la cita, y Biden lo hizo el martes, procedente de Bruselas, donde participó en sendas cumbres de la OTAN y con sus aliados de la Unión Europea.
Putin valora positivamente diálogo con Biden
Tras la tan ansiada reunión que acaparó los ojos del mundo, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, valoró positivamente la cumbre con su homólogo estadounidense Joe Biden, y afirmó que “no hubo ninguna hostilidad” pese a las discrepancias existentes.
“Considero que no hubo ninguna hostilidad. Al revés. Nuestro encuentro transcurrió en una clave de principios, nuestras valoraciones difieren en muchos aspectos. Pero desde mi punto de vista, ambas partes demostraron el deseo de comprender el uno al otro y de buscar un acercamiento de las posiciones“, afirmó.
El mandatario ruso añadió que “la conversación fue muy constructiva“. “Los temas eran conocidos por todos: la estabilidad estratégica, la ciberseguridad, los conflictos regionales, las relaciones comerciales. También hablamos sobre la cooperación en el Ártico“, indicó.
“Hemos llegado a la conclusión de que tenemos que seguir cooperando en el ámbito comercial”. El objetivo, asegura, “corregir las pérdidas que sufren las empresas rusas y estadounidenses por las restricciones impuestas respectivamente”, detalló.
Putin hizo hincapié en la palabra “optimista” al hablar del tono y del sentido del encuentro. “Si la tendencia (de cooperación) persiste, será beneficiosa para las dos partes”, tras hablar de una cita “constructiva, honesta y libre de presiones de ningún tipo”.
“Creo que hablamos el mismo idioma, lo que no significa que nos tengamos que declarar amor eterno”, sentenció el presidente ruso, quien definió a su homólogo como “una persona constructiva, bien equilibrada, con experiencia y un gran político”.
Biden califica el encuentro con Putin como “productivo”
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, por su parte reveló que en el encuentro con su homólogo ruso acordaron que si no logran avanzar en la agenda bilateral que han establecido “en tres o seis meses” podrían volver a reunirse. Por lo tanto, calificó como “productivo” el encuentro, en el que llamó a favorecer la cooperación entre ambos países frente al conflicto.
Biden explicó que durante la reunión trasladó a Putin que la agenda de su Administración “no es contra Rusia”, sino para defender “al pueblo estadounidense”.
En este sentido, el jefe de la Casa Blanca indicó que “el tono de la reunión ha sido muy productivo y positivo”, a pesar de que hay algunos puntos “en los que no estuvimos de acuerdo”
En relación a los Derechos Humanos, y en referencia al caso del opositor ruso encarcelado Alexei Navalni, Biden adelantó que comunicó a Putin que “no se trata solo de perseguir a Rusia cuando violan los Derechos Humanos, se trata de quiénes somos”, por lo que seguirá planteando “cuestiones de libertades fundamentales”.
En este sentido, advirtió de que “las consecuencias” de una hipotética muerte de Navalni “serían terribles para Rusia”.
Finalmente, Biden indicó que el presidente ruso, Vladimir Putin, no busca una nueva Guerra Fría con Estados Unidos.
“Creo que lo último que quiere ahora es una Guerra Fría”, dijo en rueda de prensa Biden, quien advirtió a Putin que “algunas infraestructuras cruciales” deben quedar al margen de ciberataques. “Le di una lista” de 16 entidades que “van del sector de la energía hasta nuestros sistemas de distribución de agua”, agregó.
Biden confirmó la información que había proporcionado el propio Putin en rueda de prensa tras la cumbre de que los embajadores ruso y estadounidense volverán a sus puestos diplomáticos, después de abandonar Moscú y Washington en abril, tras una batería de sanciones impuestas desde la Casa Blanca.
En relación a la importancia de este encuentro cara a cara, Biden reconoció que era necesario reunirse en persona con su homólogo para “que no pudiera haber errores o tergiversaciones sobre lo que se quería comunicar”.
Así, la cumbre de Ginebra mejora el clima entre Estados Unidos y Rusia, aunque se mantienen los serios desencuentros en múltiples temas.