En el declive del Rey, Viva el Rey… o la Reyna

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Un sexenio se pasa rapidísimo. Ya ven, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ya hasta celebró el tercer año de haber ganado las elecciones en julio de 2018.

Y aunque hasta diciembre próximo cumple los tres años de haber asumido el mandato, él mismo ha marcado el inicio del declive de su sexenio.

Eso haber si lo termina, no sea que le hagan efectiva la revocación de mandato.

Por lo pronto, en el inicio del declive del Rey, los mismos morenistas se han encargado de pregonar Viva el Rey o la Reyna con la fiebre sucesoria rumbo al 2024.

Ahí andan Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum Pardo, Mario Delgado Carrillo y Ricardo Monreal Ávila en la carrera sucesoria, entre los más visibles.

Hasta la tragedia de la Línea 12 del Metro ha servido para obstaculizarse el camino con destino a suceder a AMLO con la seguridad de que Morena volverá a ganar las elecciones presidenciales.

Mientras, la ciudadanía continúa en espera del cumplimiento de las expectativas generadas por López Obrador en su campaña como candidato presidencial.

En fin, pasadito el uno de diciembre próximo se acelerará el declive del Rey.

¡Qué pronto se pasa el tiempo!

 

EL DECLIVE DE GOBERNADORES 

Los que sí ya entraron en pleno declive de sus sexenios son los seis gobernadores de las entidades donde en 2022 habrá renovación del titular del Ejecutivo.

Son Alejandro Murat Hinojosa de Oaxaca, y Omar Fayad Meneses de Hidalgo; ambos del PRI. Y Durango, Quintana Roo y Tamaulipas, donde han gobernado los panistas José Rosas Aispuro Torres, Carlos Manuel Joaquín González y Francisco Javier García Cabeza de Vaca; este último, perseguido por la justicia; además Martín Orozco Sandoval de Aguascalientes

 

EL DECLIVE DE ALEJANDRO MURAT Y QUE VIVA EL REY O LA REYNA 

Parece que fue ayer cuando Alejandro Murat Hinojosa, siendo Director General del Infornavit, empezó a recorrer Oaxaca con el fin de posicionarse en el ánimo del electorado de una entidad donde no nació, ni creció, ni conocía, pero que aspiraba gobernar por el PRI.

Su inteligente esposa Ivette Morán entró primero vía la Fundación AMO, y así empezó a recorrer comunidades; Alejandro no podía hacerlo tan abiertamente porque era servidor público, aunque lo hacía de manera mesurada y hasta donde la función se lo permitía.

Entusiasmados por recuperar la gubernatura, los priistas oaxaqueños le ayudaron promoviendo su nombre en cada rincón de la entidad. Hicieron una especie de campaña adelantada sin candidato. Hasta le confeccionaron un andamiaje jurídico para cumplir los requisitos de elegibilidad.

En ese momento era el inminente nuevo Rey.

Mientras Gabino Cué Monteagudo era el Rey en declive, el primer gobernador de oposición al PRI, y que como candidato de la coalición PRD-PAN-PT-Convergencia generó grandes expectativas, pero la ciudadanía terminó decepcionada porque no pudo cumplir ni supo gobernar; fue un pésimo experimento de gabinete plural sin control.

Ahora Alejandro Murat se encuentra exactamente en el mismo momento, aunque en su gobierno por lo menos ha habido una relativa paz, no los aciagos días de bloqueos carreteros en el último trecho del sexenio de Gabino Cué, pero éste, a diferencia de su sucesor, hizo más obra: En la capital oaxaqueña se le recuerda por su puente elevado.

En fin, que habiendo entrado Alejandro Murat al fin de su sexenio y a casi dos meses de iniciar el proceso electoral para la gubernatura, tristemente no hay candidato o candidata visible en el PRI.

Quien sabe si por temor al grupo político al cual pertenece Alejandro Murat o porque de plano le ven nulas posibilidades al Revolucionario Institucional de ganar las elecciones 2022.

Morena per se le lleva una ventaja al PRI de alrededor de 400 mil votos; en 2018 y 2021 Morena ha sostenido una votación de 700 mil tanto en elecciones federales como locales.

En el PRI nadie se está moviendo por el momento. Tampoco en el PAN, y menos en el PRD. Ah, pero en Morena todo está en movimiento, y todo se mueve en torno a este partido. Y ya hasta pueden decir la famosa frase sucesoria “Muerto el Rey, viva el Rey…o la Reyna”. 

En su reciente visita a Oaxaca, entrevistado en el Aeropuerto y a pregunta expresa, el Director General del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda, manifestó su aspiración de contender por la gubernatura.

Y si la gubernatura oaxaqueña fuese determinada por género, entonces la posibilidad la tiene Narcedalia Ramírez Pineda.

Está muy claro. Amén de la posibilidad de Susana Harp. Sin embargo y sin menospreciar el talento de la senadora, Narcedalia posee vasta experiencia en la administración pública, legislativa y social.

Mientras que la posibilidad de Salomón Jara Cruz cada vez es menor, por lo menos para la candidatura de Morena a la gubernatura de Oaxaca.

Vaya, si Luis Antonio Ramírez Pineda ya soltó su aspiración es porque algo se cocina al más alto nivel.

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