- Lorenzo Córdova advirtió que en un contexto dominado por la intolerancia, se está empujando, eventualmente, hacia reformas electorales que no necesariamente ayuden a la democracia.
- Los partidos políticos, dijo, todavía muestran que tienen un “déficit de cultura cívica” para respetar esas acciones y no intentar “simulaciones” en su cumplimiento.
El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, afirmó que en las últimas elecciones la autoridad electoral resintió la mayor cantidad de ataques desde el poder, el mayor recorte presupuestal y propuestas de reformas en la materia francamente regresivas.
Córdova narró el impacto de las acciones afirmativas en las pasadas elecciones y destacó la relevancia de esas medidas para diversos grupos vulnerables que permitió, en el caso de las mujeres, incrementar su presencia en la Cámara de Diputados de pasar del 48.2 por ciento en la actual legislatura al 49.6 en la próxima integración.
Además, subrayó la importancia de la promoción de acciones hasta llegar a la paridad de postulaciones a nivel municipal, a pesar de lo cual hubo un retroceso marginal en las alcaldesas que habrá al pasar de 27.2 a 25.8.
Córdova lamentó que en contraste con la promoción de acciones afirmativas, se haya incrementado la violencia política en razón de género cuyas modalidades se han tornado más compleja por la incidencia de las redes sociales en las campañas políticas.
El consejero advirtió que en un contexto dominado por la intolerancia y la polarización “se está empujando, eventualmente, hacia reformas electorales que no necesariamente pueden venir en esta lógica a consolidar y fortalecer lo que hasta ahora hemos alcanzado, sino bajo la promesa de transformar radicalmente está institucionalidad democrática pueden implicar francos retrocesos”.
Agregó que “por lo anterior es necesario el involucramiento de todos los partidos políticos para conocer y analizar las propuestas de reformas electorales y que la sociedad, los especialistas, y las autoridades electorales puedan participar, en el caso del INE, con el aporte técnico que caracteriza el trabajo del instituto en la redefinición del andamiaje electoral, “para que el futuro de nuestra nación sea de una democracia mejor, más robusta, y no de una democracia más precaria”.