- Brasil fue el país con el mayor número de reportes sobre la presencia de nuevas sustancias en su territorio.
- La base de datos de la ONU contabilizaba mil 47 sustancias a nivel mundial al cierre de 2020.
El Programa Global de Monitoreo de Drogas Sintéticas (SMART) de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) reporta que, en el bienio 2019-2020, 11 países de la región notificaron 68 sustancias no antes conocidas en el mercado clandestino.
La pandemia de coronavirus no frenó la aparición de nuevas sustancias sicotrópicas (NSP) en los mercados clandestinos de drogas de América Latina.
Brasil fue el país con el mayor número de reportes sobre la presencia de nuevas sustancias en su territorio, con 36 comunicaciones, seguido por Chile con 24, Colombia con 16, Argentina con 12 y Uruguay con seis. También hubo notificaciones de las agencias de investigación de Bolivia, Costa Rica, Jamaica, Paraguay, El Salvador y Trinidad y Tobago.
Los datos son preliminares y pueden estar sujetos a cambios, indica la organización con sede en Viena, Austria. Señala que las cifras definitivas aparecerán en el informe regional Drogas sintéticas y nuevas sustancias sicoactivas en América Latina y el Caribe que será publicado en octubre. El reporte preliminar confirma que la aparición de nuevas sustancias sicoactivas constituye un desafío regional en ascenso.
A nivel mundial, 126 países han reportado la aparición en sus territorios de al menos una nueva sustancia sicotrópica. La base de datos de la ONU contabilizaba mil 47 sustancias a nivel mundial al cierre de 2020.
Otra tendencia regional que inquieta a las autoridades de Naciones Unidas tiene que ver con el aumento del uso de ketamina, una sustancia que no está sometida a fiscalización internacional, pero cuyo consumo fuera de un contexto médico puede ser letal.
La Organización Mundial de la Salud señala que el abuso de esta sustancia, de uso humano y veterinario, puede aumentar la frecuencia cardiaca y la presión arterial, así como la toxicidad respiratoria. Además puede generar problemas de vejiga, ansiedad, ataques de pánico, palpitaciones, taquicardia, dolores de pecho, depresión e incapacidad para hablar.
El consumo de ketamina en combinación con estimulantes como las anfetaminas o la metanfetamina puede disparar la presión arterial.
Se requiere más información de los laboratorios forenses para tener el retrato completo de la magnitud de la problemática en el conjunto de la región.
Las alertas están encendidas principalmente en Argentina, Chile y Colombia, en donde se identifica un aumento de su uso en combinación con otras sustancias.
En 2019 fueron decomisados 319 kilogramos de ketamina en América Latina; las mayores incautaciones tuvieron lugar en Argentina y Chile.
Los consumidores de drogas en el mundo sumaron 275 millones en el último año
Alrededor de 275 millones de personas consumieron drogas durante el último año a nivel global, un 22% más que en 2010, reveló el informe anual de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC).
El documento establece un panorama general del mercado mundial de drogas, con especial foco en el impacto de éstas en la salud y el bienestar de la población en el contexto de la pandemia de Covid-19.
El impacto socioeconómico de la pandemia
Según el análisis, la crisis del Covid-19 empujó a más de 100 millones de personas hacia la pobreza extrema y ha exacerbado el desempleo y las desigualdades. Por consiguiente, los problemas de salud mental crecen en todo el mundo. Este conjunto de factores de riesgo tiene el potencial de estimular un aumento de los trastornos relacionados con el consumo de drogas.
El estudio pone de manifiesto los cambios observados en los patrones de consumo de drogas durante la pandemia, entre ellos el aumento del consumo de cannabis y el uso no médico de sedantes farmacéuticos. También es probable que los factores socioeconómicos subyacentes contribuyan a acelerar la expansión del mercado de sustancias ilícitas.
El papel de la tecnología
Según el análisis realizado por la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito, en cuanto a los narcotraficantes se han recuperado rápidamente de los contratiempos iniciales causados por las restricciones y los confinamientos impuestos por la pandemia. Más aún, agrega que hoy en día están operando de nuevo a los niveles anteriores a la pandemia, impulsados en parte por el mayor uso de la tecnología y los pagos en criptomoneda.
El acceso a las drogas también se ha simplificado más que nunca a través de las ventas en línea, y los principales mercados de drogas en la red de internet oculta (también llamada web oscura) tienen hoy en día un valor estimado de 315 millones de dólares anuales. Las transacciones de drogas sin necesidad de contacto, como por ejemplo a través del correo, también están en aumento, probablemente como resultado de la pandemia.
La rápida innovación tecnológica, combinada con la agilidad y adaptabilidad de los narcotraficantes, quienes ahora utilizan nuevas plataformas en línea para vender drogas y otras sustancias ilícitas, probablemente incrementará la disponibilidad de las drogas ilícitas.