Pues sí. Resulta imposible ayudarlo y enloda al PRI más y más hasta las cachas, cada vez que abre la boca. O cuando regresa otro extraditado a México o salen las frivolidades de Peña Nieto, como sucedió esta semana. Alito ¿perseguido? ¿amenazado? el derecho al pataleo tiene límites y este sujeto ya se pasó 3 pueblos violentando la inteligencia de los ciudadanos. Allá el priismo que se traga todos sus dislates.
Evidenciado por sus audios mostrando el desprecio del PRI a las libertades como ningún partido en la historia de México lo ha hecho, mostrando su autoritarismo y antidemocrático talante, inigualables, superlativos, tan priistas, Alito balbucea que no huirá del país. Raro sería que no. A algunos priistas hasta visa dorada les dieron en España, mientras dejaron saqueado a México bajo las siglas PRI. Y se hacen los ofendidos los priistas abiertos o encubiertos y balbucean comparativos tontos para medio salir al paso. Por favor.
Por más que se le intenta lavar la cara al dirigente priista, y al PRI, fracasando en ello, esfuerzo que denota más zalamería y agradecimiento a favores que a periodismo serio y comprometido, no hay forma de conseguirlo. Más tardan en elogiarlo o victimizarlo para que parezca inocente, que en salir un nuevo audio o en regresar al país otro ladrón cuya vida política se hizo por el PRI. Ya ni intentarlo, de verdad.
¡Uy! qué malos son los otros, los de otros partidos, ¡ja! pero dígase: jamás ni por tiempo en el poder ni por los montos desfalcados, superarán al PRI en represión, desfalco e ineptitud probada. No hay manera. Las muestras de pésimos gobiernos priistas como los que hoy 5 de junio se juegan la permanencia del partido o como Edomex, grisura insuperable de priismo, son la prueba acumulada de su incapacidad de gobierno; y algunos políticos millonarios lo son por su etapa priista, antes que nada y por ejemplo. Es que desfalcar se les da. Y mal gobernar, lo de siempre. Es el PRI.
Y los comparativos buscando decir que otros son peores que el PRI, son muy burdos al final de cuentas, porque el PRI robó más, reprimió más y persiguió más a la prensa. La de verdad, no guasadas como Latinus. Y lo sigue haciendo el PRI porque putrefacto, nunca ha tenido remedio. Lo sabemos. Cuando Alito ha dicho “hay que matar a los periodistas de hambre”, revela al putrefacto PRI y que no hay de otro. Y no hay en la oposición al PRI tamaña declaración semejante. No hay punto de comparación. El PRI desprecia y combate la libertad. Las palabras de Alito el priista, son un hálito enemigo de la democracia y llevan inconfundible sello PRI.
Y es normal, ya que el PRI no sabe cómo se come eso de ser democracia. Solo es eso. No hay que darle tantas vueltas a intentar inútilmente lavarle las enlodadas siglas al PRI. No se les quitará la mancha ni con legía. Y solitos los priistas las enlodan, que es lo mejor de todo, para que ni se llamen a víctimas ni perseguidos. Su desdén a la democracia que los exhibe, pueden quedárselo y su desvergüenza lavacaras innegable, también. No tienen remedio.
Con ese panorama llegamos al 5 de junio, día de elecciones donde el PRI mal gobernante, se la juega; y lo hace con respiración artificial, en alianzas; con César Duarte extraditado luego de prófugo, sumándose a los tantos del nuevo PRI desfalcadores y que hicieron que Interpol pareciera la sede alterna del PRI. Ningún partido iguala al PRI en corrupción, como para que ni inicien estériles comparaciones.
Y qué decir de la desvergüenza del priista Peña Nieto. Pavoneándose en España derrochando recursos que su trayectoria de burócrata no le dan. Por mucha herencia o legado recibidos. No nos hagamos. Ambos casos no lavan las siglas PRI.
Peña Nieto, que encabezó el peor gobierno de México y dicho por priistas, mar de corrupción y de ineptitud personal, salió bueno para el “bisne”. Las cantidades que “justifican” su vida y visa de oro en España, dejan bastante qué sospechar y enlodan al PRI, recordándonos porqué merecidamente se le echó de la presidencia de 2018. Por aquellos desmemoriados o los que ahora como Alito, obvian y que tan tontamente se victimizan.
Lo de Peña en España es una afrenta y callarse el PAN como con Alito, una vergüenza. Nos recuerda la forma en que el PRI encubre a su gente, la endiosa (LordPeña dice una estúpida expresión que lo idolatra, por quien se llena con cualquier tostada) porque pues sí, lo de Peña en España lleva a preguntarnos: ¿ladronde sacó para tanto? Y las siglas son PRI, porque el susodicho es parte del partido hasta donde se sabe y lució las siglas de PRI. Así que sobran las justificaciones, los partidos y las excusas burdas, burdas. Como las tores declaraciones de Calderón diciendo que el 5 de junio se saque a la mentira y la ineptud. Vaya, que no sabe que los 6 estados en juego los desgobiernan entre PRI y PAN. Escupió al cielo.
El cuadro invita a pasar del PRI. México merece mejores estadíos y el PRI no es parte de ellos. Y lo sabemos: el “nuevo PRI” jamás ha existido, es el mismo de siempre. Y el 5 de junio es ideal para decirle adiós, ya sea solo o en alianza.