La pregunta

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Luis Carlos Galán Sarmiento, excandidato a la presidencia de Colombia en 1982, 1986 y 1989 y asesinado por órdenes de Pablo Escobar Gaviria el 18 de agosto de 1989 en un histórico mitin de campaña, aseguró que no permitiría que ningún colombiano al presentar su pasaporte en el extranjero fuera confundido y acusado de ser narcotraficante.

Desafío al poderoso cártel de Medellín asegurando que no permitiría más un narcoestado en su nación. Eso le costó la vida.

Hoy los mexicanos somos vistos ya a distancia. Aún, uso esta condicionante, nuestra aceptación internacional no ha caído tan bajo como para pensar que todos somos delincuentes, pero vamos rápido a esa percepción.

Porfirio Muñoz Ledo lanzó una aseveración que se ha perdido en el contexto de la feria de distractores, dijo: “debe entender Andrés Manuel López Obrador que su contubernio o alianza con el narco no es heredable… ya no va a necesitar el narco al presidente… va a prescindir del presidente y habrá peligro de que exija más a los nuevos actores…” y la clave está en esa reflexión pública “¿YA NO VA A NECESITAR EL NARCO AL PRESIDENTE” y entonces? Es la pregunta, ¿entonces que sigue?

Hay especialistas de Estados Unidos que aseguran que por lo menos el 30% del territorio nacional está totalmente dominado por el crimen organizado. El jefe del Comando Norte de Estados Unidos (US Northcom), el general Glen VanHerck, estimó que los cárteles del crimen organizado transnacional operan en alrededor del 30 al 35 por ciento del territorio mexicano, “en áreas que son con frecuencia ingobernables”, causando muchos de los problemas que está enfrentando la Unión Americana en la frontera con México.

Y este volumen de participación de los delincuentes en la vida económica, social y política aumentó con los resultados de las recientes elecciones en seis Estados del país llamando la atención Tamaulipas, Oaxaca y Quintana Roo.

El tráfico de drogas, la migración, el tráfico humano, son síntomas de las organizaciones criminales trasnacionales que están operando con frecuencia en áreas ingobernables en nuestro país detallan informes de Seguridad Nacional del vecino norteño.

Argumenté en colaboración pasada que es de preocupación que Acapulco y Cancún sean núcleos del narcomenudeo y de asesinatos. Aquí podría añadir a Veracruz. La liberación de Ovidio no fue una anécdota para el café, es el significado de la fuerte influencia y operación de los sicarios ante el Estado México y de acuerdo a Muñoz Ledo, el poderío de estos hará desechable al presidente y a las instituciones. El Ejército Mexicano ya no responderá a la frivolidad de los abrazos. Cada soldado será tiro al blanco.

Y entonces la advertencia de la Casa Blanca será una acción contundente, no permitirán que todo personaje en el poder genere alianzas o fortalecimiento de bandas criminarles o narcotraficantes. Por ello AMLO ni acudido a la Conferencia de las Américas porque corre el riesgo de que la aseveración de Porfirio, allá ya sea un expediente en investigación.

Conductor del programa VaEnSerio mexiquensetv canal 34.2 izzi 135 y mexiquenseradio 1600 am y 1089 am Edomex

@cramospadilla