Como producto de la panadería, el pan expuesto más que orearse, se endurece, ya no es grato, se inutiliza. Un pan duro suele no ser aprovechable. Suele tornarse incomible y no aporta, sino desazón. Un pan duro es lo contrario a lo necesitado. El PAN cuando queda expuesto, también se muestra endurecido. En esos casos, pierde su encanto y ofrece su peor fisonomía, tal y como le ocurre en estos momentos al extraviado instituto político. Y actúa respondón, retobón. Sus peores rostros y carencia de ideas, campean. Son su imagen innegable y su incapacidad se nota en sus carencias y evidentes insuficiencias propositivas.
Partamos de que es una pena que un partido opositor al PRI, antes que a otro, diluya su identidad ganada por décadas, se le parezca tantísimo, se asocie, se le una; que, en consecuencia, al elector le de igual votar PAN que PRI porque son lo mismo, se unen y nada hace por diferenciarse –y menos, bajo la conducción de Marko Cortés– y dado igual votar por uno que por el otro y para mal, termine coludido con el PRI, solapándole sus trapacerías y en vez de construir opción, se oculte bajo sus faldas para hacer frente a Morena. Un PAN tan solo preocupado en Morena, que no es capaz de construir su propia opción sensata, agenda constructiva que atraiga votantes y simpatizantes. Puras tonterías, ocurrencias y disparates lanza, para aparentar que son distintos a Morena. Eso sirve de muy poco. Pagado todo eso con dinero público, es denunciable. El PAN actual le celebra todas al PRI y ha dejado de señalarlo. Penoso y decepcionante. Ha traicionado la democracia otra vez al optar por darle entrada en tantas ocasiones, por no perseguir a sus deplorables representantes ladrones, por solo insultar y preferir al PRI antes que cambios reales y democráticos, encerrado en su necedad y su monólogo apanicado, cae en la absoluta inopia. Su silencio frente a Alito es una vergüenza. Ese es el camino elegido por Acción Nacional frente a otro: crear su agenda propositiva liberal y con ella, sí demostrar que podrían ser mejores y si lo fueran de verdad, dándole 3 y las malas al PRI y a Morena. Mas, regodearse en la mediocridad de Marko Cortés les paga tanto a los panistas y con ella se les ve tan satisfechos, que ya ni para qué ayudarlos. No se les extiende más el voto a los panistas y punto.
Porque México necesita partidos de avanzada y el PAN se fue por el camino fácil: diluirse con el PRI, aliarse con él, su antítesis histórica. Si Gómez Morín, Abel Vicencio Tovar, Carlos Castillo Peraza, Luis H. Alvarez alzaran cabeza….En esa tesitura, optando con muy poco ingenio y con la estrategia burda y reprobable de ignorancia, escoge la desinformación, la mentira, el insulto, la tergiversación y sin proponer una agenda propia y sensata alternativa, viable, lógica, hoy prefiere entregarse al mangoneo vergonzante del Señor X. No les ha redituado electoralmente antes, y es muy dudoso que lo haga en 2024.
Es evidente que la estrategia actual además de equivoca, traiciona los ideales de sí mismo, el proyecto de Gómez Morín (¿dónde dice en sus estatutos e ideario panista que había que entregarse a Claudio X. González?) y por si fuera poco, carece de una agenda donde reconozca sus propios errores y en que fueran propositivos e incluyentes, optando mejor los panistas por encumbrar a Marko Cortés, a Kenia o a Rementería. A Lilly Téllez o arropan al impresentable de Quadri y solapan a Anaya. ¿Les hace falta tanto extravío? a juzgar por su proceder, sí y eso cómo pudre la democracia mexicana. ¿En serio, no tienen mejores cartas? si nos salen conque Creel o Fernández de Cevallos, de perdida Fox, entonces está claro que el PAN carece de figuras, está anquilosado, se quedó en el pasado y reniega del futuro. En eso, también se parece tantísimo al PRI. De su forma de desgobernar Guanajuato y Tamaulipas incendiados por el narco, la corrupción dejada en Baja California, resultan hechos innegables, denunciables y merecen serles recordadas.
¿Qué si no se alían con el PRI, no les alcanza para vencer a Morena, dicen? Qué carencia de imaginación y de propuesta. Eso les pasa porque no son opción con su actual comportamiento. Porque no han construido agenda y propuesta. ¿En serio les une tanto al PRI? ¿pues no que no son lo mismo, entonces? Aliarse con el PRI es apuntalarlo para desgracia de todos y pudre la esencia del PAN. Si PRI y Morena son lo mismo, PAN ¿por qué te alías al PRI? Que sean conscientes de ello. Y al menos, se responsabilicen de hacerlo, porque el panismo evade sus responsabilidades y niega sus errores que ¡vaya que los niega! y ¡vaya que los comete! y su corrupción blanquiazul, rampante y desbordada, no es menor ni son casos aislados. Esa carencia de valor civil enloda a sus siglas. El PAN no ha logrado incrementar sus preferencias electorales. Y no lo hará con su actual estrategia. Si son tan buenos ¿por qué no reciben más votos?
Guanajuato y Tamaulipas incendiados por el narco, sin planes panistas de acción de contención –la seguridad es corresponsabilidad de todos los niveles de gobierno– o la corrupta alcaldía Benito Juárez, los cacicazgos de dirigentes en Edomex; Fox –dejando severas dudas de su ecuanimidad y de su salud mental–, Calderón (del que no acaba de deslindarse), la elección sin ejercicio democrático ni opciones frente a Cortés, un impresentable cuya estampa nos recuerda cómo ha extraviado el rumbo y desencaminado al partido. Demasiada corrupción e incapacidad de gobierno bajo el PAN.Y a ese PAN duro que no halla cómo ser de otra manera y siendo así, se le aleja el electorado; Anaya ya lo había fracturado y pan rotó no se pega; no es el primero que lo rompe, pero sí el más reciente y vergonzante que lo hace y desde ahí, solo ha sido exposición con Marko Cortés –nulidad de ideas, cero propuestas lógicas y arropando cuasi prófugos como Anaya, a quien el Señor X no le hace ojitos– y los ciudadanos lo ven como uno de ellos. Así no se gana elecciones y Anaya no aprendió nada de su derrota de 2018. El PAN perdió bastiones que defendieron otros antes y que Cortés ya ni supo cómo –primó su mentecatez, con caradura de nulo liderazgo o tino para conducir al blanquiazul– como extraviado va Jorge Triana defendiendo con más torpeza que gracia, a Calderón acusando el narco en Morena, con García Luna en el haber panista o como si jamás hubieran detentado la Presidencia, quedando tanto a deber desde ella, los panistas. Triana enumera sus grandes obras olvidándose de la “Estafa de Luz”. El PAN es corrupto y ni perder su tiempo, negándolo. Hoy, al PAN lo distinguen también su talante antidemocrático y arbitrario.
Suponemos que los panistas tienen que tragar con esa dirigencia. No habrá más remedio para ellos. México no tiene esa triste necesidad ni el país es solo panista, porque no todo México es panista. Eso nos permite defenestrar a su actual dirigencia, esa que otros exdirigentes panistas cuestionan, porque han entendido que su andar es errático. No es que tales exdirigentes vendan piñas, pero está claro que Cortés va equivocado. Gustavo Madero se lo echa en cara a Cortés, que prefiere apoyarse en su visión maniquea monotemática de López Obrador para simular un liderazgo de pacotilla. Sí, Madero, otro impresentable, pero de momento es quien alza la voz demostrándonos que cabe la sensatez en el PAN, ajena a encumbrar Kenias y Rementerías o la impresentable Cuevas – con su inoperancia, intolerancia y petulancia– o el corrupto Cabeza de Vaca que deslucen sus cacayacas, Kiko Vega, que nos recuerdan que el PAN conoció tiempos mejores. Ni son caso aislados ni mucho menos menores, como tibiamente los califican panistas embelesados y soberbios. La frivolidad de Creel solo se supera con la cachaza de Anaya. ¿Y qué hay de privatizar el agua en Querétaro, confundiendo lo público y lo privado? Viéndolo normal. Y el PAN boicotea ejercicios democráticos constitucionales como la revocación de mandato a López Obrador, pero enfila otra en su infinita inconsistencia, insubstancialidad y incongruencia, clamando por impulsar la revocación de mandato en Nuevo León. Qué ridículos.
¿El PAN ha convivido con el narco? No solo es que lo solapó vía García Luna, sino, que cohabitó con el cartel de Tijuana en 25 años gobernando BC. Y cohabitando con El Chueco en la panista Chihuahua. ¿Y la moratoria constitucional? Cobrando sin trabajar. Para eso no se les votó. Demuestran incapacidad panista para debatir y mostrar un plan B en todo.
Ni idea de si a los ojos de los panistas todo esto los sonroja, siendo actos atentatorios de la democracia que los descalifica como opción de gobierno o para abrir la boca cual si no fueran y hubieran sido ya gobierno, que lo son y han sido, debiendo tanto y decepcionando, más.