Aprovechando que el rector se ausentaría para recibir algunos reconocimientos en Europa, por Granada, Sevilla y Valencia, las hordas de Palacio Nacional se volcaron contra el Rector de la UNAM el Doctor Enrique Graue Wichers, acusándolo de no comprobar sus gastos basándose en una tarjeta de American Express, ello no podría lograrse sin la intervención e Pablo Gómez titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
El martes 3 de mayo en Granada las universidades de San Marcos de Lima y la UNAM, reciben un reconocimiento por la fundación de ambas instituciones y su aportación a la educación. Luego asiste la universidad de Sevilla le otorga el Honoris Causa, después asiste en Valencia a la Quinta reunión de Rectores de Hispanoamérica, a junto con 700 rectores cien de ellos Graue es nombrado en el comité internacional, que mediante encuestas determinaron cuales son las mejores universidades de Hispanoamérica.
Hay que destacar orgullosamente, que el Rector de la UNAM, asiste con un plus destacado y es que la Facultad de Derecho está considerada como la mejor escuela de Derecho de Hispanoamérica, en el rubro de Derecho y Estudios Jurídicos (Law & Legal Studies), en el QS World University Rankings by Subject 2021, que este año evaluó a más de cinco mil instituciones de educación superior, esfuerzo del director de la facultad de Derecho el Doctor Raúl Contreras Bustamante, y su comunidad, quien se ha destacado por representar un gran liderazgo universitario secundando los esfuerzos de rector Graue.
Sorprendente resulta que evidentemente por encargo del Zócalo, el misil haya surgido de la Unidad de Inteligencia Financiera dirigida por Pablo Gómez Álvarez egresado de la facultad de Economía, quien a diferencia de otros políticos de MORENA como Martí Batres que no obtuvo su título en Derecho de la UNAM, Pablo si lo logró titularse, aunque diez años después de ingresar, y quien se hiciera famoso – a propósito de la reciente muerte del Rector Pablo González Casanova – por bañar de pintura y plumas al entonces Rector, lo que provocó su renuncia, por la intolerable falta de respeto, siendo un rector de izquierda y – supuestamente – Pablo encabezaba un movimiento de “izquierda” también.
El rector Graue es conocido por tener una tradición familiar de tres generaciones como médico oftalmólogo y por realizar labores altruistas de operaciones y atención a pacientes con problemas de la vista, mediante la fundación Conde de Valenciana. Llama la atención que un medio tan desprestigiado entre la comunidad universitaria, como fuera la Jornada que en otros tiempos fue referente de imparcialidad y critica al gobierno y hoy haya pasado a ser “pasquín del gobierno” palabras que usa con frecuencia el presidente obrador, sea quien se hiciera eco de las acusaciones cuando la Jornada recibe alrededor de doscientos millones anuales del gobierno de MORENA.
El rector se ha esforzado por llevar la fiesta en paz con los morenistas, tanto que ha beneficiado a oscuros personajes como Ackerman, y a la directora de la Jornada favoreciendo a su hermano que hoy es miembro de la junta de gobierno de la UNAM.
Junto a Pablo Gómez, hay otros líderes del 68 “de izquierda” que son comparsa de las ocurrencias de obrador y que guardan silencio ante el resentimiento de funcionarios que tardaron hasta catorce años en titularse, por no cumplir con los elementales requisitos de excelencia, que exige la UNAM, en ello tienen una falta histórica, cuando se percibe que pretenden parar a la UNAM para que, como en el 68 – entonces justificado el paro – se de un fenómeno de direccionar la demanda de estudiantes que entonces (1968) se incrustaron en escuelas privadas, hoy pretenden lo mismo para llenar la universidad del bienestar, en deterioro de la calidad de las generaciones de estudiantes.
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