A pesar de la inconformidad interna, Morena sigue en su estrategia de sumar y hasta otorgar candidaturas a desprendimientos de otros partidos políticos, principalmente del PRI y del PAN, con el propósito no solamente de ganar todo en las elecciones concurrentes de junio próximo, sino de desaparecer a la oposición.
Ya ven, la Comisión Nacional de Elecciones decidió la precandidatura única a la alcaldía de Mérida, Yucatán, por la coalición “Sigamos Haciendo Historia” (Morena-PT-PVEM) a favor de Rommel Pacheco, porque éste medallista olímpico (quien en el 2021 llegó a la diputación federal por el PAN) resultó el “mejor posicionado en las encuestas”.
Y el ex panista Joaquín “Huacho” Díaz Mena será el abanderado para la gubernatura de la entidad yucateca, donde desde el 2018 se venía desempeñando como Coordinador Estatal de los Programas de Desarrollo del Gobierno Federal tras perder la elección al mismo cargo popular frente a Mauricio Vila Dosal, del PAN; partido al cual “Huacho” renunció en ese año porque no fue favorecido con la postulación.
Dos ex panistas ¿los mejores posicionados por encima de morenistas?
Se entiende que Morena y aliados pretenden desfondar al PAN en Yucatán, entidad hasta ahora gobernada por este partido político.
Pero morenistas están como agua para chocolate. Al menos el grupo encabezado por Alberto Nolasco Sosa y Miguel Candila Noh, que rechaza la designación de Rommel Pacheco como precandidato de la coalición de Morena a la alcaldía de Mérida.
Y dicen que no apoyarán “chapulines”, entonces “ni un voto” para éstos.
Ya se verá en los resultados electorales: Si funciona la estrategia de Morena o surte efectos la amenaza de los inconformes. Puede que ambas; que los ex panistas ganen con el voto de panistas y ciudadanía en general, aunque los morenistas descontentos no voten.
Puede suceder también que al final de cuentas los morenistas se disciplinen tal como está sucediendo en diversas entidades del país, incluso en el ámbito nacional; están encabritados con la designación de desprendimientos de otros partidos políticos para candidaturas de Morena o de la coalición, pero se aguantan.
En fin, puede que los morenistas inconformes de Yucatán o de cualquier otra entidad intenten hacer perder a ex panistas o ex priistas no votando por éstos. Pero ¿en el caso de los “chapulines” en postulaciones plurinominales?, ni cómo hacerle.
TEPJF, SIGUE EL CONFLICTO
Lamentablemente la renuncia del magistrado Reyes Rodríguez Mondragón a la presidencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y la elección de la magistrada Mónica Aralí Soto Fregoso en sustitución de él, no solucionó el conflicto interno en el máximo órgano jurisdiccional en materia electoral.
Este miércoles fue evidente.
En la ceremonia cívica con motivo de la primera sesión del año 2024, encabezada por Soto Fregoso no asistió Reyes Rodríguez, ni la magistrada Janine Otálora Malassis; la magistrada presidenta nada más estuvo acompañada de los magistrados Felipe de la Mata Pizaña y Felipe Fuentes Barrera, quienes la respaldaron para llegar a la presidencia del TEPJF.
Y en la primera sesión del Pleno de la Sala Superior, realizada este miércoles, no asistió Reyes Rodríguez, quien se vio opacado en los últimos días de su gestión porque Mónica y los dos Felipes no lo invitaron al encuentro institucional con la precandidata presidencial de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, Xóchitl Gálvez Ruiz, siendo aún el magistrado presidente.
A la sesión sí asistió la magistrada Janine tal vez en un acto de ética profesional para no romper el quórum.
¿Se imaginan las votaciones cuando se encuentren las cinco magistraturas en funciones? Se corre el riesgo que voten las sentencias con el hígado.
Urge que el Senado de la República designe las dos magistraturas vacantes.
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