- Hace más de una década no se veían ataques de tal magnitud del grupo subversivo que ahora se autodenomina Militarizado Partido Comunista del Perú.
- Entre 1980 y 1992, el grupo maoísta Sendero Luminoso desató una lucha armada contra el Estado peruano, que dejó alrededor de 70 mil muertos.
El asesinato de 16 personas, entre ellas cuatro niños, atribuido a remanentes del grupo terrorista Sendero Luminoso, ocurre a dos semanas de las elecciones en Perú.
La polarización política en Perú de cara a la segunda vuelta presidencial el 6 de junio se ha intensificado tras este crimen.
Según el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Perú, se dejaron folletos referentes a la elección presidencial en el lugar de la masacre, perpetrada en el centro poblado San Miguel del Ene, en el aislado Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), región pobre y escarpada que produce el 75% de la cocaína de la nación sudamericana.
Medios locales mostraron los panfletos, que pedían explícitamente “limpiar el VRAEM” de las trabajadoras sexuales, minorías LGBT y drogadictos, al tiempo que llamaban a la población a votar nulo en las elecciones y calificaban específicamente a los votantes de la candidata de derecha Keiko Fujimori de traidores.
En respuesta, Fernando Rospigliosi, integrante del equipo de Fujimori y exministro del Interior, dijo durante un debate que realizó el grupo de expertos Diálogo Interamericano que, si el partido de derecha Fuerza Popular gana, “los vamos a exterminar”, en alusión a los grupos responsables de la masacre.
Según analistas, hace más de una década no se veían ataques de tal magnitud del grupo subversivo que ahora se autodenomina Militarizado Partido Comunista del Perú (MPCP). Entre 1980 y 1992, el grupo maoísta Sendero Luminoso desató una lucha armada contra el Estado peruano, que dejó alrededor de 70 mil muertos.
“Ellos quieren transmitir el mensaje de que todavía están vigentes, quieren llamar la atención para dividir a la población. Esta es una guerra no convencional, y cuando se trata de una guerra no convencional no interesa cuántos sean. Muchos dicen que ya no es Sendero Luminoso, pero siguen siendo el mismo tronco. Ahora están al mando de Víctor Quispe Palomino y aplican la misma metodología de 1980, pero redefinida. Ellos anhelan llegar al poder a través de las armas o a través de las elecciones”, opinó Pedro Yaranga, analista peruano experto en seguridad integral y terrorismo.
Si bien los asesinatos provocaron la condena de todo el espectro político, incluido el oponente de izquierda de Fujimori en la elección, Pedro Castillo, Rospigliosi afirmó que la respuesta de los partidos de izquierda fue débil, lo que llevó a la congresista electa de Perú Libre Betsy Chávez a calificar al exministro de arrogante y a destacar que todos los representantes de su partido habían denunciado el ataque.
Según la Comisión de la Verdad que se formó en 2000, los enfrentamientos entre Sendero Luminoso y el Estado peruano causaron cerca de casi 70 mil muertes, de las cuales más de la mitad fueron atribuidas al grupo terrorista y el resto fue causado por actividades estatales, especialmente durante el gobierno del desprestigiado expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).
Fujimori cumple una condena de 25 años por abusos a los derechos humanos, abuso de poder, malversación, corrupción y soborno durante su presidencia. Su hija Keiko Fujimori ha sostenido que lo indultará si vence en las elecciones, pero, si la justicia veta el indulto, como sucedió con el que otorgó el expresidente Pedro Pablo Kuczynski en 2018, ella respetaría la decisión del Poder Judicial.
Keiko Fujimori recorta distancias con Pedro Castillo
La candidata conservadora Keiko Fujimori pisa los talones de Pedro Castillo, según las últimas encuestas publicadas a unas semanas de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Perú. A pesar de que el candidato populista de izquierdas aún encabeza todos los sondeos, la líder del fujimorismo ha logrado recortar una distancia que a mediados de abril era de hasta 20 puntos, incluso, algunos ejercicios estadísticos aseguran que ya va a la cabeza.
Según la encuesta publicada por la consultora del Instituto de Desarrollo e Investigación de Ciencias Económicas (IDICE) del Perú, la brecha entre Keiko Fujimori y el candidato de la izquierda Pedro Castillo se acortó: la candidata de Fuerza Popular se ubica en 45.4% y el profesor en un 42 por ciento.
Pero el escenario continúa abierto. Es que otro sondeo, realizado por IEP, asegura que Castillo aventaja en más de diez puntos a su rival (44.8% a 34.4%).
