Concluido prácticamente el proceso electoral de 2021, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador y por Ricardo Monreal como líder de hecho en el Senado, las fuerzas políticas entraron ya al debate de hacía dónde se debe orientar la reforma político-electoral.
La propuesta de AMLO se dirige hacia una reducción de pluris en el Senado y la Cámara de Diputados, al tiempo de acotar funciones y alcances de resoluciones de los consejeros del INE todo dentro de una reducción sustancial del financiamiento público tanto al INE como a los partidos políticos.
Ricardo Monreal matiza su propuesta, al incluir em el debate el uso de mecanismos digitales para promover y recibir el voto ciudadano dentro de una revisión a fondo de los financiamientos en razón d que el voto a distancia disminuirá sustancialmente la participación de ciudadanos en la captación del voto y su cómputo.
Otros legisladores de Morena en el Senado y en San Lázaro de plano plantean la anulación, desaparición de la figura de legisladores de representación proporcional, que fue creada para dar paso al Congreso a las minorías políticas en el país.
Ayer, dentro de este debate, Damián Zepeda, expresidente del PAN y excoordinador de su grupo en el Senado, propuso una reforma constitucional para que los partidos políticos tengan el número de senadores y diputados federales en forma proporcional a su votación.
Su propuesta no altera el número de diputados y senadores de mayoría ni el de los pluris, solo el método de llegada al Congreso de estos últimos.
Así, solamente se utilizaría la representación proporcional para llegar a la representación real expresada en las urnas.
La asignación de diputaciones y senadurías plurinominales sería tal que cada partido político alcance un número total en la Cámara igual, en términos porcentuales, al porcentaje obtenido en la votación total emitida para la elección de legisladores por el principio de representación proporcional.
Esto se haría partiendo del número de legisladores que cada partido obtenga por medio del principio de mayoría relativa, hasta alcanzar el porcentaje de legisladores que corresponda al porcentaje de votos válidos del partido que corresponda.
Además, la asignación de diputaciones y senadurías plurinominales, se determinaría, en términos porcentuales, por el equivalente al porcentaje obtenido en la votación total emitida para la elección de diputados por el principio de representación proporcional.
El senador también propuso que no se asignen legisladores plurinominales a partidos políticos que, por el número de diputados o senadores de mayoría relativa, tengan un porcentaje igual o mayor al correspondiente a su votación nacional.
La Comisión Permanente del Congreso de la Unión manifestó su profunda preocupación por los recientes hechos “en los que las libertades políticas, civiles y de libre expresión están siendo agredidas en Nicaragua”.
El debate, pues, está abierto hacia una nueva reforma electoral y política .
EL SENADO, PREOCUPADO POR LA DEMOCRACIA EN NICARAGUA
Luego de que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador se negó a votar un extrañamiento desde la ONU al gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, la Comisión Permanente dio lectura, a través de su presidente Eduardo Ramírez, a un llamado hacia el respeto a las libertades y las libertades políticas en aquel país.
El llamado se hizo a propuesta de la Segunda Comisión, que preside la senadora priísta Claudia Ruiz Massieu.
Así diputados y senadores de la Permanente hicieron votos para que el pueblo nicaragüense recupere los espacios políticos para la reconciliación, la paz interna y el respeto irrestricto a los Derechos Humanos.
Pidieron además al presidente Daniel Ortega, generar las condiciones para que la elección general del próximo 7 de noviembre, se celebre de forma libre, legal, incluyente, transparente y pacífica.
“Valoramos la decisión de convocar a consultas al embajador de México en Nicaragua, para conocer el estado de las acciones políticas-legales realizadas por el gobierno de ese país, que han puesto en riesgo la integridad y libertad de representantes de la oposición, activistas y personalidades de la sociedad civil nicaragüenses”, expresó el morenista chiapaneco Eduardo Ramírez, presidente del Senado. El documento fue suscrito además por el diputado Marco Antonio Medina Pérez y las senadoras Xóchitl Gálvez y Beatriz Paredes, secretario y secretarias de la Segunda Comisión de la Permanente.
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