El excandidato perredista Raúl Ojeda Zubieta se ha convertido en una suerte de juez cibernético de honor y justicia del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador en Tabasco, por su sistemático rechazo al ingreso a Morena de expriístas que, a su decir, carecen de prendas morales.
Se desconoce, al menos este reportero no lo sabe, si quien fuera secretario de Gobierno la mitad del sexenio del perredista Arturo Núñez Jiménez continúa militando en el PRD o si ya se afilió al movimiento de AMLO, lo que parece indicar su sentido de pertenencia cuando se refiere al conjunto vintotinto.
La rebelión de Ojeda subió de tono el pasado 2 de septiembre que el gobernador Carlos Manuel Merino designó al expriísta Juan Carlos Castillejos como secretario técnico y de seguimiento gubernamental, si bien ya antes había impugnado con dureza la suma del experredista, expriísta y exverde Oscar Cantón Zetina.
Antier volvió con el tema: “(¿) Juan Molina Becerra a Morena? (¿) Es en serio?”, posteó.
Y remató: “Una pregunta. (¿) No se reservan el derecho de admisión? Es para una tarea”.
Una usuaria de esa red social (Kari Rodríguez) le hizo “la pregunta del millón” al de Jonuta: ¿Dónde queda usted?, a lo que contestó: “Pronto, muy pronto lo sabrán tú y muchos paisanos. Deja hablo con los nietos”.
Lo del “derecho de admisión” a que se refirió Ojeda fue en alusión a que en 2012, poco después de rendir protesta como gobernador de Tabasco, Núñez usó esa frase en una entrevista sobre la desbandada de priístas hacia el PRD.
En aquella ocasión, el marido de Martha Lilia López Aguilera señaló que solo dos priístas no tenían entrada al partido que recién había tomado el poder y entre los vetados se encontraba Juan Molina Becerra, quien había sido secretario de Elecciones del PRI durante los comicios de 2012, cuando fue derrotado el abanderado tricolor, Jesús Alí de la Torre.
La inconformidad por la llegada de priístas a Morena había sido un expediente que había estaba en segundo plano, de alguna manera oculto, solo alimentado por la pataleta de cuadros que se sienten “cercanos” López Obrador y que no han logrado cargos en el gobierno estatal.
Fue hasta ahora que Ojeda hizo pública su molestia por el ingreso Molina que detonó como tema principal de redes sociales, pues con Cantón y Castillejos pasó de noche su berrinche.
Los tuits de Ojeda contra Molina fueron repartidos masivamente, y si bien se rebotaron en publicaciones de sitios usados por priístas, en su mayoría las compartieron cuentas de ciudadanos comunes.
En chats de redes sociales del municipio de Macuspana, de donde es originario Molina, de inmediato se entendió su llegada como la preparación de su candidatura para alcalde de la tierra del presidente López Obrador, cargo que ya perdió compitiendo por el Revolucionario Institucional.
PARA SU INFORMACIÓN…
EL MARTES PASADO le dijimos en este espacio que el problema del agua potable no se ha resuelto porque los políticos lo tienen como rehén de sus intereses: antier, el senador perredista Juan Manuel Fócil Pérez aseguró que en el trienio de Evaristo Hernández Cruz “por lo menos” llegaba agua turbia a los hogares de Centro y que ahora con Yolanda Osuna Huerta “ni eso”. Esto es, a los ojos del legislador la alcaldesa que lleva veintitantos días en el cargo es la responsable de esa crisis que lleva varios trienios.
@RodulfoReyes