Si bien no es oficial, el priista Adrián Rubalcava es el primer alcalde que se baja de la alianza opositora, para tomar su propia ruta, al menos hasta que llegue la hora de la definición en 2024.
Técnicamente sigue perteneciendo al grupo de alcaldes que, tras derrotar a Morena formaron la UNA, pero desde hace rato dejó de asistir a las reuniones argumentando cuestiones de salud, que efectivamente padece.
Sus colegas tienen claro que Rubalcava ya trae comunicación con Claudia Sheinbaum, luego de que en los dos primeros años hubo hielo, al grado de ser vetado desde el Zócalo.
Muchos creían hasta hace poco que el distanciamiento del alcalde con la UNA se debía más a la carpeta judicial que hay en su contra, que a la idea de acercarse a la 4-T.
La realidad es que Adrián y Claudia han ido limando asperezas, e incluso más adelante pudieran ser aliados políticos. Pesa también que el alcalde tiene la responsabilidad con sus gobernados, y prefiere llevarla bien con el Centro.
Este acercamiento estuvo a punto de romperse con el escándalo de la comentada boda entre Santiago Nieto y Carla Humphrey, que culminó con el cese de Paola Félix como secretaria de Turismo en la capital.
Y es que, luego de la caída de Paola, Brenda Ruiz, una de las principales asesoras del alcalde de Cuajimalpa, festinó y hasta brindó por el cese de la funcionaria, odiada enemiga de su jefe.
Adrián y Félix hicieron equipo en 2012, cuando el alcalde la hizo diputada federal por el PVEM. Ya en la Cámara, ella traicionó la causa al gestionar recursos que en lugar de enviar a Cuajimalpa, como correspondía, los etiquetó para Chiapas.
Ahí rompieron y entonces se desató una guerra mediática entre ambos, que acabó en los juzgados bajo acusaciones de acoso y violencia. Ese desencuentro fue aprovechado por Morena para lanzar a Paola como candidata en Cuajimalpa contra Adrián en 2015, pero fue derrotada.
Ya como gobernante de la CDMX, Sheinbaum la integra a tareas de turismo para la capital, y como seguía diciendo que era víctima de Rubalcava, a quien por orden judicial tenía que pagarle un un millón de pesos, Claudia le agarró tirria al alcalde.
Ahora que la jefa de Gobierno comenzó a cambiar su percepción sobre el priista, la comunicación estuvo a punto de romperse de nuevo por el tema de Paola, pues tras el imprudente festejo de Brenda Ruiz, quisieron culpar a Adrián de haber dado el pitazo.
Parece que las aguas se están calmando, pero no es la primera vez que riega el tepache por no cerrar la boca. En agosto de 2016, cuando era cercana al PAN, se filtró una conversación telefónica de ella con el diputado Jorge Triana.
En esa llamada, Brenda describía la fiesta de cumpleaños de Mariana Gómez del Campo, asegurando que todo mundo se ahogó en alcohol, al grado de que Federico Döring insultó a medio mundo, aunque a él no se le notaría porque “acostumbraba meterse coca”.
Por supuesto que todos desmintieron a Ruiz, que fue echada del seno azul, pero apareció Rubalcava en su rescate. Alguna cualidad le debió ver, pues la hizo su sensei; hoy también a él lo mete en líos.
CENTAVITOS
Para los que andan con el pendiente de quién ocupará la cartera que dejó Paola Félix, tras irse por sus pistolas a la famosa boda a Guatemala, se barajan ya los nombres de la expriista Dunia Ludlow, autoridad del Centro Histórico, y del presidente de la Canaco local, Nathan Poplawsky. Si se impone el género, será Dunia; si prevalece la expertise, sin duda será Nathan.