Ante la exposición de eventos relacionados con la prima hermana del presidente, Felipa Obrador, la inquietud de mis amables lectores me obliga a brindar más información al respecto.
Lejos de los atractivos contratos de esta señora con Pemex por alrededor de 364 millones de pesos llama la atención las enormes extensiones de terrenos que “administra” Felipa en una área doblemente rica: primero porque colindan con la zona arqueológica de Palenque y segundo porque se verán absolutamente beneficiadas con el proyecto del Tren Maya.
Felipa “administra” la cooperativa Chay Tyoxja El Dorado, está opera dos hoteles el Winika Hábitat y el Winika Alterra reconocidos como predios rústicos. El primer inmueble Winika Hábitat presenta una extensión de 32 hectáreas pero únicamente ocho habitaciones; el segundo, Winika Alterra, es de 6 hectáreas con 6 habitaciones.
Lo curioso es que esta mujer ha gestionado para sus “desarrollos turísticos” el cambio de uso de suelo que le permita habitación y servicio de hospedaje, es decir, se pretende un desarrollo de importante inversión en materia hotelera. De hoteles boutique se podría convertir en un importante complejo de atracción mundial con una muy notoria plusvalía. Y sucedería, cómo se ha dado a conocer, que la prima hermana del presidente ha recibido adjudicaciones directas y sin concurso alguno en el Instituto Mexicano del Petróleo, Aeropuertos y Servicios Auxiliares, el ISSSTE y el Instituto Mexicano del Seguro Social. Por todo lo anterior los diputados del PRD ya la denunciaron ante la Fiscalía General de la República por presunto tráfico de influencias en asignaciones directas.
Ahora no sólo Felipa Guadalupe Obrador Olán está obligada a presentar públicamente una explicación, sino el mismo que presume gobernar bajo la honestidad valiente. Y es que no solamente la administración del “complejo hotelero” está en entredicho sino una empresa de esta mujer que se conoce como Litoral Laboratorios Industriales S.A de C.V. Y no es el primer caso en que la familia del presidente se ve bajo sospecha de manejos con influencias poderosas.
Ahí tenemos el caso de una chocolatera en Chiapas en donde son los propios hijos del mandatario los que están involucrados sin proporcionar datos creíbles, registro público y montos de inversión.
Anticipaba que los archivos y folders intrigantes se están acumulando en los pasillos de Palacio Nacional, la humilde residencia de aquel que impulsa la austeridad republicana.
Conductor del programa Va En Serio MexiquenseTV canal 34.2