El sábado, el presidente del Comité Nacional de Morena, acudió a Oaxaca para encabezar la presentación de solicitud del registro de Salomón Jara Cruz como candidato a gobernador de Oaxaca, en coalición con el PT, el PVEM y el partido local Unidad Popular (PUP).
Pero antes de ir al Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), Mario quiso ofrecer una conferencia de prensa, igual que en cada entidad donde va de gira, más que para respaldar candidaturas, para prodigar, con devoción abyecta, infinidad de loas al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
No es casualidad. La jornada de Revocación de Mandato está a la vuelta de la esquina: El 10 de abril, casi dentro de un mes. Entonces, se entiende que Mario Delgado aprovecha todo foro para hablar bien de AMLO con el ánimo de alentar a la ciudadanía a acudir a las urnas electorales para votar “porque continúe” Andrés Manuel como Presidente de México, y no por que se vaya.
En cada foro, es evidente pues su afán de denostar a la “derecha”, a los “conservadores” con un discurso antediluviano, casi idéntico al usado en ocasión de la elección presidencial de 2018. Como se dice en al argot común: “Ya chole”.
Y esa es la misma cantaleta de los “distinguidos” miembros de los partidos políticos que integran la “Cuarta Transformación”, con excepción del Verde, cuyos militantes usan un lenguaje más moderno y educado.
Retomando el tema: Pues Mario Delgado, con su discurso robotizado, llegó a Oaxaca para desatarse hablando pestes de la “derecha” y de los “conservadores” que cuestionan al presidente AMLO. Y en ese contexto, el dirigente de Morena dijo:
“No es casualidad que se lancen con todo algunos mercenarios de los medios de comunicación que se hacen llamar periodistas, pero que no son periodistas…”
Y las personas periodistas ahí presentes, incluidos camarógrafos y fotógrafos, reaccionaron de inmediato: “Fuiii, fuiii” “¡Respeto para la prensa!” “¡Respeto para la prensa!” “¡A lo tuyo!” “¡A lo que viniste!” “¡Corrupto!” “¡Fuera, fuera, fuera!” “¡Respeto, respeto, respeto!”
Eran tantas las rechiflas, exigencias de respeto, y mentadas en versión chiflido, que se hacía inaudible la voz de Mario Delgado intentando recomponer su desafortunado comentario.
Apenas se le oía decir: “Ustedes nada tiene que ver con estos comentarios”.
Pero las y los periodistas ahí presentes estaban realmente encabritados, sin escucharlo seguían protestado:
“¡Respeto a todo el gremio!” “¡Respeto a todo el gremio!” “¡Respeto a la prensa!” “¡Corrupto!” “¡Fuera, fuera, fuera!”
Un minuto más y el salón del lujoso hotel donde se llevó a cabo la conferencia de prensa se hubiese quedado vacío. Las personas periodistas estuvieron a punto de abandonarlo dejando con la palabra en la boca a Mario Delgado, solo con quienes lo acompañaban en la mesa, entre ellos los dirigentes estatales de los partidos aliados y Salomón Jara.
Por cierto, sus acompañantes sonreían evidentemente nerviosos, y otros, como el diputado federal Benjamín Robles Montoya, ya no sabían donde meter la cara sufriendo la pena ajena.
Después de varios minutos, Mario Delgado consiguió decir: “Aquí están ustedes ejerciendo la libertad de expresión con libertad”.
No le quedaba de otra.
Si Delgado Carrillo asistió a Oaxaca para respaldar la candidatura de Salomón Jara Cruz a la gubernatura de Oaxaca, sobre todo cuando la senadora Susana Harp Iturribarría no quita el dedo del renglón en su impugnación al proceso de selección interna de Morena, entonces por qué el líder de Morena empezó hablando de temas que ni al caso.
Perdió la oportunidad de explayarse ensalzando el proceso de Revocación de Mandato en su vertiente de que “siga el Presidente de la República”. Claro, jamás se pronunciará por alentar a la ciudadanía a votar porque se vaya AMLO; éste lo corre, entonces ¿de qué va a vivir don Mario?
Y de paso estropeó el lucimiento de los eventos en torno a la presentación del registro de la candidatura de Salomón Jara por la coalición “Juntos Haremos Historia por Oaxaca”. Y casi nadie prestó atención a dicho acontecimiento político; los reflectores fueron acaparados por el desafortunado comentario de Mario Delgado.
Además, la atención ciudadana también estaba puesta en la violencia desatada en el Estadio Corregidora.
¿QUÉ SIGNIFICA MERCENARIOS?
Buscando en diversos diccionarios y páginas web, mercenario es más bien un término bélico que se ha distorsionado cayendo en lo peyorativo.
Estos son algunos significados de la palabra mercenario:
“Dicho de un soldado o de una tropa: Que por estipendio sirve en la guerra a un poder extranjero.”
“Persona que desempeña por otra un empleo o servicio por el salario que le da”.
“Que lucha a cambio de dinero o de un favor y sin motivaciones ideológicas.”
“Que realiza cualquier clase de trabajo por una retribución, generalmente económica, o que trabaja con el único interés de ganar dinero.”
“Un mercenario es un sujeto que realiza por otro una tarea o una misión a cambio de dinero. A nivel general, puede decirse que el mercenario es quien percibe una paga por sus servicios, aunque el concepto tiene una connotación despectiva.”
MERCENARIO
Pregunta: Mario Delgado Carrillo ¿milita en Morena por verdadera convicción y vocación democrática? ¿O porque es el partido político de moda?
Es obvio que Mario ejerce la política en busca de posiciones, ahora desde Morena; tal como lo hizo cuando militó en el PRD. Posiciones y paga, claro; pues nada es gratis en esta vida y menos en política.
Si un periodista calificara a Mario Delgado como “mercenario”, ¿se ofendería?
El periodismo, la comunicación en cualquiera de sus modalidades, es una profesión, una actividad lícita, un oficio digno; quienes lo ejercen narran hechos, redactan los dichos o declaraciones de políticos, realizan investigación.
¿Dónde ésta el pecado?
Ah, para los de Morena y aliados (con sus honrosas excepciones) quienes informan, escriben, hablan, de situaciones que no les favorecen, entonces con “mercenarios”. Pero si los llenan de loas, son “democráticos”.
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