Es cada día más notorio que el país está sin rumbo. He escrito que el presidente perdió la agenda nacional desde que le estalló las irregularidades de su hijo José Ramon y su casa en Houston. Desde entonces, también he afirmado, el presidente ya no acciona, reacciona, es un contestatario enfurecido.
Mientras el mundo gira, debate temas de desarrollo, se miden consecuencias de enfrentamientos bélicos, los científicos frenan la pandemia, se modifican liderazgos en instituciones multinacionales, aquí el presidente se toma una semana completa para insultar a los defensores del INE y otra semana para promover su marcha.
De ahí no pasa. Se volvió a meter en problemas históricos al tratar de revivir el nombre de “héroes” nacionales todos muertos, muchos asesinados, para indicar que de vivir estarán con él.
Que lea un poco sobre las confrontaciones de Madero y Zapata para que no los involucre en su misma ideología. Que revise los pronunciamientos de Villa o de Flores Magón para saber que nunca se entendería con ellos. Lo cierto es que es el primer presidente que estimula una marcha en contra de los mexicanos además de que está peligrosamente atentado contra la fe, es decir, generando conflictos con la Iglesia que dice la va a ir a “acusar” al Vaticano.
Es de preocuparse como otras naciones evolucionan administrando sus recursos mientras AMLO admira a perdedores y dictadores del Caribe y Latinoamérica.
No busca espacios para el diálogo sigue, continúa en la terquedad de la confrontación. Argumentaban los perdedores en las elecciones “si le va bien al presidente le va bien a México”, pues actualmente ni a uno ni a otro.
Enumeraba las contradicciones de sus corcholatas como Ebrard festejando su presencia en el Mundial en un país de esclavistas, homofóbicos y que violenta las garantías y derechos humanos. Vemos a Sheinbaum gozando de la Fórmula Uno, de la NFL y del partido de México contra Polonia y Adán Augusto considerando que la marcha en defensa del INE fue una “caricatura”.
Muestras hoy y documentadas del acarreo que habrá el 27, hay testimonios, videos y grabaciones y AMLO lo niega porque dice contar con un 70% de popularidad. No lo sé. El sábado y lunes la carretera México-Cuernavaca fue tomada por manifestantes durante todo el día con abierta impunidad y protección del gobierno. Ni un solo detenido por atentar contra las vías federales de comunicación y el libre tránsito de terceros, filas de autos por más de 30 kilómetros.
Dudo que alguno de los afectados directamente o indirectamente estén aplaudiendo al mandatario, CAPUFE, Guardia Nacional, Gobernación o Jefa de Gobierno, todos omisos solo en esos actos ilícitos mientras crece el número de pobres en extremo en el país. AMLO está levantando tempestades y eso en verdad es de preocuparse, sólo proyecta su día en ganar adulaciones, intentar trascender, promoverse como “héroe” y no le importa el país, ni la violencia, ni sus enfermos, ni la educación, ni la economía… quince días hablando de marchas y lo que nos falta.
Conductor del programa VaEnSerio mexiquense tv canal 34.2 izzi 135 y mexiquense radio.
@cramospadilla