¿A qué nos enfrentamos?

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Estamos entrando a una zona de riesgo en donde vemos venir un tsunami y no nos estamos preparando.

Los pendientes de presidencia crecen al igual que los frentes innecesariamente abiertos, veamos: hay muchas dudas y sospechas sobre la detención de Ovidio Guzmán (actuaron agentes extranjeros, por qué no ha sido presentado a los medios, será extraditado, fue presión de Biden, han capturado a maleantes en Culiacán que incendiaron comercios y quemaron vehículos?); el atentado a Ciro Gómez Leyva que pese a su gravedad no se han evidenciado avances; el caso de la ministra Yasmín Esquivel que con el peritaje esperado de la UNAM se doblará a las conclusiones gubernamentales; la fractura diplomática con Perú y sus delicadas consecuencias; los constantes accidentes en el transporte público y la impunidad con que se protege a los responsables…en fin, eventos muy delicados sin conclusión, sin información y bajo la tutela de un gobierno seriamente inclinado a proteger los “derechos de los delincuentes”.

Entonces nos enfrentamos a una administración omisa y cómplice de irregularidades como los dispendios en las obras faraónicas del mandatario en tanto el despilfarro también se observa en campañas electorales irregulares y retadoras. Las imposiciones presidenciales se disfrazan de “encuestas” y Delgado queda solamente como un títere manipulado. AMLO destapa s sus “corcholatas” en un perverso juego distractor pero que arranca un enfrentamiento patológico por conseguir el poder como sea y atropellado al que se confíe.

Un presidente que trata de ocultar sus iniciativas acusando “seguridad nacional” incluyendo su inestable estado de salud y por ello lanza lo que llama su “testamento político”. Después de mostrar su bajo nivel frente a Trudeau y Biden, AMLO continuará con su demagogia populista defendiendo y afilando a tiranos extranjeros. Ha mostrado que prefiere colocar a México como defensor de los autoritarios que como negociador con potencias industrializadas.

Es contrario al aspiracionismo y al capitalismo, por tanto, sus acciones de carácter social lo inclinan hacia un comunismo añejo y anacrónico. Viene dos procesos electorales importantes en donde lo más notorio de los morenistas es la violación a la ley tolerada y amparada desde Palacio.

Sus candidatos a Coahuila y al Edomex están marcados por abusos e ilícitos. La destrucción del INE es un propósito cotidiano, pero habla con demócratas invitados a una Cumbre trilateral que refrendan el respeto a las decisiones ciudadanas y no a los caprichos presidenciales.

No se ha terminado el asunto de la militarización y venos a un grupo criminal muy superior a las Fuerzas Armadas pero la intención de generar más beneficios de toda índole a los mandos militares mientras que a la tropa la mantienen como carne de cañón, albañiles o policías sin tolete. Dos años de cierre de gobierno donde el mandatario se burla diciendo que no me salgan con que “la ley es la ley” y que la pandemia le cae “como anillo al dedo”.

La persecución contra los medios y periodistas se incrementará y los asesinatos de los colegas solamente son un obituario archivado por inconveniente.

Así pues, nos enfrentamos a un escenario incierto, cargado de malas decisiones en el presupuesto y administración nacionales, con ataques furibundos a la oposición, noticias desagradables de corrupción, desmantelamiento de leyes y reglamentos electorales que se deberían respetar, un presiente débil que cierra débil y enfrentado con todos y un desmedido crecimiento, peligroso, del crimen organizado en todos los rincones, niveles y decisiones en el país.

Serán dos años terribles que marcarán el destino de un gobierno malo y manipulador. Ni ha sido honesto y si brutalmente agresivo.

Conductor del programa VaEnSerio mexiquensetv canal 34.2 izzi 135 y mexiquense radio.

@cramospadilla