Me resistía a aceptarlo y más a expresarlo, me refiero a esas durísimas declaraciones de algunos políticos afirmando que la conducta del gobierno federal en cuanto al combate al coronavirus se trata de un acto criminal. Pero debo confiar que hoy me ocurrieron dos eventos que me sacudieron por completo.
Primero, recibí la información de que en la valoración internacional México es el peor país calificado después de Brasil por el comportamiento negligente y simplista de las autoridades con respecto a los contagios, fallecimientos, protocolos sanitarios y medidas preventivas. Ya la Organización Mundial de la Salud nos había advertido sobre la ausencia de seriedad y más tarde diría que somos un foco tóxico para el mundo.
Varios países piden a sus ciudadanos no venir a nuestra nación y aquellos de los nuestros que por algún motivo salen al extranjero son revisados rigurosamente. Segundo, me enteré hoy jueves del fallecimiento por cáncer de la hermana de un gran amigo. No había servicios funerarios para atenderla y dieron aviso que la cremación será hasta el lunes debido a la saturación de cadáveres.
Esto ya es inadmisible y mas por la cínica manipulación que intenta el gobierno para esconder su fracaso. Insisten en que todo está controlado y que tenemos, entre ellos a López Gatell, a los mejores personajes del mundo atendiendo la emergencia. Sin embargo funcionarios del primer círculo de AMLO se han obligado a practicarse exámenes médicos por la enorme irresponsabilidad de AMLO al poner en riesgo la vida de otros por su terquedad a cumplir con su obligación moral y legal de proteger la seguridad y salud de la población.
Ocupamos aún el cuarto sitio mundial de países con más fallecimientos por el coronavirus y estamos muy próximos a rebasar a Brasil para quedar por debajo de Estados Unidos y la India aunque ambas naciones nos superan y por mucho en población.
La gente se está muriendo y hay quien intenta distraer señalando que nosotros, la sociedad, somos corresponsables de la tragedia. Nada más falta que nos coloquen como los equivocados en la compra de las vacunas que, debo decir, no entiendo por qué nos reservan la información de cuánto nos están costando. Hay que ser claro, se están adquiriendo con nuestro dinero y considero que los otros gobiernos, incluyendo a Putin, no nos ven como merecedores de altruismo.
Toda la pandemia nos está saliendo muy cara empezando por los engaños que no respetan la muerte de más de 153 mil mexicanos. Pero todos los políticos expresan su solidaridad al tabasqueño y pocos muy pocos levantan la voz por tantas familias desprotegidas, por tantos huérfanos y viudas, por aquellos Mexicanos que fueron sorprendidos por la muerte tirados en un pasillo de hospital por no encontrar una cama donde resguardar su dignidad pero ahora sabemos que los muertos están apilados en habitaciones improvisadas porque no hay horno que alcance para cremarlos.
Conductor del programa Va En Serio mexiquensetv canal 34.2