Hoy crearemos, acá dentro de nuestro Think Tank, bienes de “opinión”, buscaremos también por todas las vías gramaticales, no dejar lugar a dudas de lo que intentamos volver un buen producto para el análisis. En este patrullamiento el Taller producirá opiniones directamente ligadas a el quid de nuestras intenciones, recordemos que este Tanque de Ideas raya en el mono/temismo siendo ese “la Seguridad y Defensa de México”
Iniciemos pues nuestro recorrido por la campiña de nuestras reflexiones.
“cuán importante es conocer, no el espíritu de la INFORMACIÓN”, y si el “espíritu del ser de esa INFORMACIÓN” y ya alcanzando esa la liguemos ipso facto al fantástico resorte de la INTELIGENCIA; todo lo anterior directamente puesto sobre el escenario de -la vida socio política del mundo donde actuamos- en palabras llanas en este artículo intentaremos encontrar y explicar -la importancia de la INFORMACIÓN y la INTELIGENCIA en los modelos geopolíticos contemporáneos. Ahora.
Como escribo desde México usaré la muy mexicana herramienta del surrealismo (con tu permiso André Bretón inició mi historia).
Los malditos días del encierro pandémico obligaron a meterme por horas, más aún, por días y semanas en textos ligados a los asuntos de SEGURIDAD; durante meses mi nariz apuntó a tópicos de Seguridad y Defensa; pretendí, usando mi tiempo en leer decenas de libros, ensayos y tratados, entender obras como el fantástico Manual de Guerra Irregular (MOC) que heredé de mi padre, del cual no entendí ni “J” (hablo de que no entendí el MOC, a mi padre sí que lo entendí). Dejaba de comer por leer buscando deducir tratados tan enredados.
Entre desvelos y mala alimentación leí los trabajos de Cristian Castaño C. donde habla de Defensa y Seguridad Nacional. Arrastré el bolígrafo para trazar apuntes llevado por los escritos de Gerardo Clemente R. Vega G, quien, se tiene que decir, posterior a su obra “Seguridad Nacional Concepto Organización y Método, Concepto Organización Método” Vega García fue Secretario de la Defensa Nacional; en lo académico Clemente Vega García nos regaló a los “oficiosos” la útil percepción de -los 4 campos del poder y el cómo formar la logística de seguridad en cada uno-. Como fuera, yo seguía en mi encierro toreando el pánico del contagio, enterarme de la muerte de gente conocida me aturdía más.
En definitiva, cuando a esas horas de resguardo obligatorio estando yo entre montes de libros, llegó, vía mensajería, el libro del Gral de Div. DEM Carlos Demetrio Gaytán Ochoa mi cabeza comenzó poco a poco a deslizarse hacia la venta de Alfonso Quijano; y es que Gaytán en su libro explicó el desarrollo de la vida militar de México ¡desde que esto se llamaba La Nueva España! la ordenada data que me obsequió la obra de quien llegaría a ser Subsecretario de Defensa de México me trasladó entre los primeros estertores de la demencia académica a los tiempos de los Virreyes. Y hay más.
Quien arrancó mi mente y la llevó a los fantásticos teatros de aquel realismo mágico citado desde el principio de mi plancha fue la seguidilla de conversaciones y notas (hoy vueltas libro EBook´s) que regularmente, vía conversaciones telefónicas, me obsequiaba Mixtli; los diálogos que venían del manglar hasta caleta vaya que exprimían mi caro cerebro. Como sea al año de la pandemia de mierda mi juicio estaba disuelto.
Y así, una tarde… o ¿sería una madrugada? de pronto levanté la mirada y en esa mi mesa donde leía, leía y leía me acompañaban John Le Carré, quien me hablaba del “el espía que surgió del frio” junto a él, en otra sillas, estaban Robert Ludlum y su alter ego Jason Barne. En otra silla Graham Green y atrás de él sus personajes de El Tren de Estambul y el Expreso de Oriente. Ah y en una silla del rincón Ian Fleming le pedía a su agente no perdiera ni una palabra de lo que se estaba hablando, James… James Bond, con una Walter PP/K en una mano y con un Martini seco/arriba en la otra obedecía. Aquí yo entendí, como los borrachos que se dan cuenta que están perfectamente ebrios pero que siguen en la trama, que yo, por tanta lectura me había vuelto loco; me relajé entonces y disfruté mi nuevo estatus de “loco” de “piantao”.
En la puerta los agentes de Cipol, (N. Solo e Ilian Kuryakin) hacían veces de 1ero y 2do vigilantes. Y decidí conversar con ellos, con todos ellos, al fin loco.
Hicimos un desarrollo analítico y mental de “la carta robada de Alan Poe”. Agatha Cristie y Hércules Poirot, que también ocupaban lugares en la mesa, susurraban en francés con marcado acento belga. Ah, y la presencia cuasi/cómica del Inspector Jacques Clouseau me recordaba que yo estaba loco y en aquel momento podía imaginar lo que fuera, aunque desde el lugar de escribano John Watson buscaba lo elemental de esta loca tenida.
Luego entonces, sabido de donde me ubicaba y que en el momento menos esperado podría regresar la lucidez decidí poner el tema de conversación buscando hacerme, con lo que ahí se platique, de productos para mis futuros tratados, – ¡hablemos de la importancia de la Información, así como del producto que arroje la inteligencia usando esa!- grité con perfil de ordenar; -y, de ser posible – agregué – ¡pongamos como terreno de trabajo los micro y macro universos del hoy! va, dijeron unos, y Sherlock Holmes (quien salió desde detrás de una pequeña nube de humo) solo dijo Just do it. A continuación, les comparto las notas que tomé de las voces que iban y venían entre esas 6 paredes.
-la información es conocimiento objetivo de un hecho o situación. Resultante de un procesamiento racional de los informes disponibles, mientras la inteligencia significa discernir, distinguir, entender, percibir o conocer. La inteligencia es más que un conocimiento objetivo, es la realización del análisis y de las informaciones, informes y datos disponibles, que resultan de la producción de un conocimiento específico – esto no lleva a entender que – el análisis de la información es el elemento fundamental de todo sistema de inteligencia -. Entonces – bajo estas articulaciones de trabajo de información e inteligencia se mantienen las tareas que nutren y activan pensamientos y acciones a realizar, sean de seguimiento, monitoreo, investigación, análisis, evaluación, instrumentación, ejecución y retroalimentación- y algo sustancial -con la información no se cancelan errores posibles, pero se busca evitar que se cometan errores por ignorancia, inexperiencia e incompetencia -.
Algo que tuve que subrayar con amarillo – la actividad de análisis e información es un trabajo de noria, de búsqueda de minero, constante, sistemático, sin fatiga, sin prefectos vigilantes que valgan, hasta que logre encontrar la pepita de oro, el hilo de Ariadna, que lo lleve a la gran veta dorada de la “información estratégica”-.
Ahora entremos al quid. En este momentum onírico al que llegué justo al volverme loco debido al “secamiento” del cerebro provocado por la insistencia de “querer saber todo del tema de la Seguridad y Defensa de mi país” pero sobre todo por el encierro entré a la tierra prometida, dicho en otras palabras, en ese pinponeo de palabras me topé de frente con “la nueva doctrina de la Inteligencia”. Recordando que, desde hace décadas en México hay paradigmas muchas veces provocados por ideas contradictorias entre entes pensantes del Ejército y sujetos civiles practicantes de la “política”, eso lo dejaré para que cada uno de mis 11 lectores lo desengrane, el asunto aquí es mostrar esa “nueva doctrina”. Ahora la enlisto.
. – mantener la protección del conocimiento sensible.
. – desarrollar un nuevo tratamiento sobre asuntos confidenciales.
. – obligar a publicitar el uso de Estado, gubernamental o político-partidario de la información.
. – crear y utilizar redes de información más amplias, que ponen en riesgo la información misma.
. – un mayor uso de tecnología satelital.
. – con vehículos no utilizados por humanos.
. – con la construcción y uso compartido de plataformas de datos y tecnología, que provoca Inteligencia en tiempo real, que afecta las respuestas.
. – así como el cambio de la visión secreta.
Dato importante. Acá las notas mentales nos dejan entender que “la doctrina en materia de Inteligencia atiende las decisiones políticas, logrando con ello: La determinación de los objetivos de inteligencia, que es una decisión política”. Fin de aquellas notas.
Concluye aquí este correteado “patrullaje”. En mi departamento que hizo veces de bunker de salud se fueron desvaneciendo aquellos que se habían invitado solos, quienes salieron al final fueron Edgar A Poe, con su cuervo al hombro y, Emilio Vizarretea que me sacó su libro de las manos, obra de donde arranqué ideas para volverlas mías, “Repensar México…una introducción a la seguridad y defensa nacionales” ocupa más de dos palabras de cada renglón en este patrullaje. Y cuando el Acapulqueño salía con su libro en las manos, con su ronca voz dijo entre dientes, ¡pirata ladrón de onzas de ideas y galones de palabras! …yo me blinde con mi locura.
Gracias a Dios, no a los Gobiernos en el mundo, la pinche pandemia se quitó del aire.
Hasta aquí este deshilachado patrullamiento; confuso si pues entre frase y frase o de un párrafo al otro se pierde la conexión; como sea el texto (y mi prestigio de escribidor) quedan en las manos de sus ojos (sic).
Ultimo patrullaje. – de alta prioridad el que, el Presidente Andrés Manuel López Obrador nombrara como Director de Aduanas al General André Georges Foullon van Lissum. Master y Doctor en Guerra y Defensa Nacional André tiene el perfil perfecto para asumir ese encargo, ahora ¿le permitirán al ex Subsecretario de la Defensa crear un equipo perfilado por él? De no ser así la rifará Perogrullo. Daremos Follow Up.
Balazo al aire. – que me llaman el loco, porque el mundo es así…
Greguería. – ¿cuál es el soldado que, durante su entrada al campo de batalla, no hace sobra?
Oxímoron. – el sordo escuchó todo.
Haiku. – tu dorso, escenario
de planes de batalla,
ganadas todas.
