Multimencionado el exrector Juan Ramón de la Fuente en este sexenio. Entró varias veces al mercado de las especulaciones y afirmaban vendría a resolver el desabasto de medicamentos y el fracaso del INSABi como titular del sector salud, también se manejó que llegaría a Relaciones Exteriores, vamos hasta se propuso su ingreso a la SEP a la renuncia de Delfina Gómez. Pues en ninguna cartera del gabinete se sumó, se mantuvo en Nueva York.
Juan Ramón de la Fuente está por concluir su tarea como representante de México ante la ONU y señaló: “Este ciclo que hemos tenido oportunidad de desarrollar y participar con mucho entusiasmo está por concluir”. Después de cuatro años al frente de la representación de México en la ONU, De la Fuente dijo que a más tardar en septiembre ya debe haber otro representante y apuntó: “Creo que para la próxima Asamblea General que empieza en la tercera semana de septiembre ya deberá de haber una nueva representación de México aquí en Nueva York”.
El controvertido universitario aseguró se reincorporará a dar clases en la Universidad Nacional Autónoma de México. “Yo al concluir esta tarea que me encomendó el presidente voy a regresar a la Universidad, solicitaré mi alta como profesor, esos son los planes que tengo por ahora”.
Pero para hablar de Juan Ramón hay que remontarnos a la historia. Como rector fue un personaje altamente mediático, carismático y con esplendió ejercicio de las relaciones públicas.
Su siempre mancuerna el exrector José Narró le acompañó en la administración de las crisis más severas al interior de la UNAM teniendo éxito en sus gestiones y colocándose Narró como el estratega, digamos la materia gris.
Juan Ramón es gente ligada al poder dentro del poder, incluso como médico psiquiatra prestó su atención profesional en Nilda Patricia la esposa de Ernesto Zedillo como presidente, así lo consignó Rafael Loret de Mola en su artículo “Contra la Pared” (octubre 2015), escribió: “llegó a la secretaría de Salud, con Ernesto Zedillo en la Presidencia, por recomendación de su padre quien era, a su vez, el psiquiatra de cabecera de Nilda Patricia Velasco la ‘primera dama’”. También así lo publicó Juan Carlos Romero en Letras Libres (mayo 2013): “Nilda Patricia Velasco, esposa del presidente Ernesto Zedillo, recibía ayuda psiquiátrica y que Juan Ramón de la Fuente había recibido la Secretaría de Salud como agradecimiento porque su padre había sido médico de la primera dama”, haciendo referencia a un serio problema de alcoholismo.
Juan Ramón supo ganarse la simpatía de los jóvenes. En su última visita al estadio de CU como rector en plena explanada del recinto los muchachos le gritaban “Juan Ramón para Presidente”, si no mal recuerdo una goleada de Pumas al Veracruz 8×0 (Nov 2007) dirigidos por Antonio Mohammed. Se comentaba entonces: Juan Ramón 8 años en rectoría, Pumas lo despide con goleada de 8. De la Fuente era capaz de sugerir a Hugo Sánchez en sus mejores momentos “no hables tanto, nadie aguanta una declaración diaria” o a René Drucker “bájale a tu soberbia”.
En el marco de conferencias en la Fundación Elena Poniatowska, Juan Ramón se presentó para dar una charla sobre el Movimiento Estudiantil de 1968 y en la cual fue increpado por ex integrantes del Consejo General de Huelga de 1999-2000.
En alguna ocasión en casa de sus padres, en el Pedregal, al concluir una entrevista para mi programa VaEnSerio de Mexiquense TV charlamos ampliamente, largo tiempo. Me hizo dos confesiones interesantes, me recordó que los candidatos a la presidencia lo habían visitado en rectoría. Me señaló que fue Calderón y no AMLO quien más asistió, aunque reconoció que el tabasqueño hizo hábilmente públicos sus encuentros y por ello lo ligaban a él.
Conductor del programa VaEnSerio mexiquensetv canal 34.2, izzi 135 y mexiquense radio
@cramospadilla