Si quieres ser “espía” …lee.

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    Lo confieso, el haber logrado el acceso a “los libros” de esa vitrina dilató las pupilas de los ojos de mi entendimiento, de esos 100 libros obligados a leer -si es que quieres ser espía- no existe párrafo ni renglón de desperdicio.

Y, debo agregar, eso antes de irme al “libro 71” que, el haber entrado a este curso de espionaje me está haciendo leer libros la mar de interesantes, eso claro además de los contenidos dentro de la vitrina ¿cuáles son aquellos libros más allá de los 100?

El primero…”Repensar México, una introducción a la seguridad y defensa nacional”. En este trabajo Emilio Vizarretea Rosales habla de la importancia de la información y la inteligencia en los geopolíticos contemporáneos; el otro libro atraído por ese tema es …”cuando los dragones se bajaron de los caballos”; este gran documento lleva al lector por un viaje sobre el sendero jinetes, el lector que arrastra las pestañas sobre sus hojas va de “al paso” al galope casi sin trotar; Juan H salinas Altés con el corazón en la mano recuerda, y nos comparte, cómo fue que el C. Secretario de la Defensa informó la desaparición de la “caballería montada”, los lectores y estudiosos de nuestro Ejército Mexicano agradecemos al señor General de División Diplomado de Estado Mayor Juan Heriberto Salinas Altés, si, emanado del arma de CABALLERÍA, el haber dado vida e historia a tal suceso. Como digo.

El tener acceso a esa vitrina tenedora de los 100 libros del aprendiz de espía, me hizo voltear a ver otros títulos.

Vayamos ahora del libro 71 al 80.

-71. “Matemáticos, espías y piratas informáticos. Codificación y criptografía” de Joan Gómez Urgellés y National Geografic. Es una excelente compilación histórica de la materia que nos ocupa, desde la antigüedad hasta la computación cuántica, desde la escritura “normal” al sistema binario (bits y qubits).

El autor nos hace ver la importancia que ha tenido para el hombre el transmitir un mensaje de forma que su significado quede oculto a los ojos del otro, a través de técnicas matemáticas como el análisis de frecuencias, la estadística, la aritmética modular y la teoría de números, donde la única limitante es la capacidad de la mente humana para crear sistemas que mantengan sus secretos a salvo, de una parte, y para conocerlos, de la otra.

72. “Franz von Papen. Espionaje, diplomacia, intriga” de Tibor Koeves. “Von Papen inició su larga carrera diplomática como agregado militar en Washington y México, en los días de la primera guerra mundial y en plena revolución mexicana, organizando una máquina de sabotaje ineficaz que, al ser descubierta, provoca su expulsión al considerarse persona non grata. Su don de gentes lo hace colocarse a las órdenes de Hindenburg y después a las del ‘Cabo Bohemio’, no obstante combatir a la ideología nazi, situación que lo aleja de Alemania para ser destinado al extranjero como embajador.

Se le considera como quien dió los primeros pasos para celebrar el pacto ruso-germano de 1939, sin embargo su arma preferida, la intriga, lo alejo del éxito, siendo procesado en Nuremberg al final de la guerra”. “El secreto de los éxitos alcanzados por aquel hombre estribaba en su habilidad por crear una atmósfera radiante de verdad, mientras él lanzaba deliberadamente su mentira”.

73. “Secretos de la II Guerra Mundial” de Selecciones del Reader’s Digest. Contiene una selección de 49 historias de espionaje y contraespionaje, donde las armas que se emplean son el cerebro, la astucia, el valor, el heroísmo y mucha suerte. El estilo sintético de los escritos de Selecciones no es el mejor, sin embargo las historias contienen datos precisos e interesantes que no son del dominio del gran público.

74. “El senador Joe McCarthy” de Richard H. Rovere. El senador por Wisconsin Joseph Raymond McCarthy Tierney se cenó a todos, aunque al final se indigestó, “fue el primer norteamericano que jamás fuese analizado y descrito como amenaza para las buenas relaciones entre las naciones. Fue el primer norteamericano en ser efectivamente odiado y temido por extranjeros en grandes números”, “el más talentoso demagogo”, el “sedicioso más audaz”, “el político norteamericano que supo llegar en forma más pronta y segura a los rincones sombríos del espíritu del norteamericano”, el angelito “pisoteó grandes partes de la Constitución de los Estados Unidos”, “Usurpó la autoridad ejecutiva y judicial cada vez que le vino en gana”, “Ejerció enorme influencia sobre la política exterior norteamericana en un momento en que tal política influía pesadamente sobre el curso de la historia universal”, “vivió despreciando absolutamente al Congreso del que era miembro”, “En Wisconsin era conocido como político barato, de métodos ruidosos y vulgares”. Bueno, tampoco se trata aquí de presumir, nosotros también tenemos nuestros legisladores innombrables, ¿qué no? Por último, el señor McCarthy se volvió epónimo, “sinónimo de lo odioso de la difamación sin fundamentos, de la calumnia infame”, “todo lo que es iliberal, represivo, reaccionario, oscurantista, anti-intelectual, totalitario o simplemente vil, será macartismo”.

75. “El Cisne Negro. El impacto de lo altamente improbable” de Nassim Nicholas Taleb. Don Nassim no se anda con sutilezas y explica a qué llama Cisne Negro: “es un suceso con los tres atributos que siguen: 1/o. Es una rareza, pues habita fuera del reino de las expectativas normales, porque nada del pasado puede apuntar de forma convincente a su posibilidad. 2/o. Produce un impacto tremendo y 3/o. Pese a su condición de rareza, la naturaleza humana hace que inventemos explicaciones de su existencia después del hecho, con lo que se hace explicable y predecible”. ¿Y por qué son importantes estos ánades sin plumas? Porque “una pequeña cantidad de Cisnes Negros explica casi todo lo concerniente a nuestro mundo, desde el éxito de las ideas y las religiones hasta la dinámica de los acontecimientos históricos y los elementos de nuestra propia vida personal”, la Ley de Pareto (el 80 % de las consecuencias provienen del 20 % de las causas) del nuevo milenio: “La ocurrencia de un suceso altamente improbable es el equivalente de la no ocurrencia de uno altamente probable”. “La idea central de este libro es nuestra ceguera respecto a lo aleatorio, es fácil darse cuenta de que la vida es el efecto acumulativo de un puñado de impactos importantes”. “La lógica del Cisne Negro hace que lo que no sabemos sea más importante que lo que sabemos, lo que sabemos puede ser por completo intrascendente”. Hasta este punto, si alguien me pregunta por cuál libro empiezo de los que se han glosado, yo le contestaría que por este, claro que dependiendo de sus propios objetivos y hasta que lea las 100 glosas que nos ocupan. Y antes de contestar le diría que me diga el nivel de su “arrogancia epistémica, aquella que mide la diferencia entre lo que uno realmente sabe y lo mucho que piensa que sabe; el exceso implica arrogancia, el defecto, humildad; el epistemócrata es alguien de humildad epistémica, que cuestiona en grado sumo sus propios conocimientos”. Junto con Taleb quizás llegue usted a pensar: “Mi primera sorpresa fue descubrir que los militares pensaban, se comportaban y actuaban como filósofos…la buena política de Defensa es aquella que consigue eliminar los posibles peligros sin recurrir a la guerra…la gente que se dedica a la Defensa desea entender la epistemología del riesgo”.

76. “La historia oculta de la especie humana” de Michael A. Cremo y Richard L. Thomson. Los autores no le discuten a don Darwin que provengamos de homínidos, si no que “en los actuales relatos de los orígenes humanos no se explica con precisión dónde, cuándo o cómo el Australopithecus dio origen al Homo habilis o cómo del Homo habilis surgió el Homo erectus o cómo el Homo erectus dio origen a los modernos seres humanos” y no sólo eso, sino que “la idea de una evolución progresiva del tipo humano a partir de antepasados simiescos ha determinado la aceptación o el rechazo de todo testimonio. ¿Los testimonios que contradicen la idea de la evolución humana son pasados por un tamiz negativo”, hasta en eso nos miente el estamento del poder mundial?

77. “Todo lo que debería saber sobre el crimen organizado en México” del Instituto Mexicano de Estudios de la Criminalidad Organizada, A. C. Los autores van directo y a la cabeza con sus conclusiones, que además saltan a la vista de aquel que quiera verse la nariz: “La causa central del crecimiento explosivo de la delincuencia es que en México (y el mundo) el crimen ha sido organizado, promovido y protegido desde el Estado” con “Formas institucionalizadas de corrupción”.

78. “El libro negro del Vaticano. Las oscuras relaciones entre la CIA y la Santa Sede” de Eric Frattini. “El telegrama estadounidense en el que se analiza la política informativa del Vaticano, critica como fuente de los conflictos informativos a una ‘jerarquía centralizada que toma decisiones descentralizadas’. El Vaticano es muy jerárquico y el papa es el responsable en última instancia de todas las decisiones. Esta estructura refleja la creencia en el principio de ‘subsidiariedad’: dejar las decisiones al más próximo y mejor informado sobre una cuestión particular. En la práctica, sin embargo, la subsidiariedad puede limitar la comunicación horizontal por la eliminación de consulta entre pares y revisiones. Este enfoque también promueve un enfoque centrado en cuestiones específicas a expensas del panorama general. La comunicación actual de la Iglesia se centraba en el contenido de una decisión, en lugar de hacerlo en su impacto público. Los funcionarios de los distintos órganos de las iglesias se ven a sí mismos como defensores de sus problemas, sin tener en cuenta su impacto sobre la Iglesia en su conjunto. El resultado es un proceso en el que sólo un puñado de expertos son conscientes de las decisiones inminentes y aquellos se convierten en defensores, en lugar de asesores imparciales del papa”. Pobrecito don papa, sus “príncipes” lo rebasan por la izquierda.

79. “La psicología de la mentira” de José María Martínez Selva. “El objetivo de este libro es describir la conducta del mentiroso, pero también la de quien quiere descubrir la verdad”, matizando que “es preciso que se pueda mentir porque, en caso contrario, no habría cortesía o las relaciones humanas no serían fluidas o suaves”. -Qué bien te ves hoy, amiga! (pinche vieja, parece que se acaba de levantar), ups. La verdad es la verdad, aun cuando la diga un mentiroso, ¿qué no? “Saber si nos dicen la verdad nos preocupa a todos y no existe ninguna técnica, instrumento o sistema, ya sean humanos o mecánicos, que permitan saber de forma infalible si alguien está mintiendo”, ni el polígrafo ni don Carl Lightman de la serie “Lie to me” (Carlos el Hombreluz y “Miénteme”, pa’ los cuates).

80. “Norberto Rivera el Pastor del poder” de Bernardo Barranco. Este vomitable libro (no por quien lo escribió, sino por las acciones llevadas a cabo por el personaje del cual se escribe), se glosa con lo que un marqués dijo hace años (para mayores señas, su marquesado era llamado ‘de Sade’) en su “Filosofía en el tocador”, al hablar de sacramentos (signos eficaces de la gracia, instituidos por Cristo y confiados a la Iglesia por los cuales nos es dispensada la vida divina): “…de los que el más indigno y abominable de todos es aquel por el cual un sacerdote, manchado de delitos, tiene no obstante el poder, por virtud de ciertas palabras mágicas, de hacer que Dios se haga presente en un trozo de pan”. Por qué Dios se vale de un “cardenal (que) encarna al obispo sinuoso, rodeado de lujos, protector de pederastas, centavero, solapador a conveniencia propia y de sus amigos: ¿actores de doble moral dentro y fuera de la iglesia”, para enunciar su verdad? Y a quienes la promesa bíblica de la segunda venida de Cristo debiera asustar más que a nadie.

Ultimo patrullaje.- no existe duda; la Guardia Nacional ideada y organizada dentro de la SeDeNa es, como lo escribió Salinas Altés en 2018, la -Cuarta Fuerza Armada-dentro del sistema militar mexicano. El “cuchillo” también proyectó en sus notas que “el corredor del Istmo de Tehuantepec será plataforma de despegue de la economía del México futuro”…eso lo escribió en el 018. Más allá del atrevimiento de haber mencionado el sustantivo afectuoso dado por sus camaradas, he de agregar que, mi General Salinas hoy, todavía nos regala sus “apuntes”.

Balazo al aire.- no hace falta “espiar”.

Greguería.- de Rosendo von Gallardo aprendí a catar el elixir del Deber Cumplido.

Oximoron.- caí en el equilibrio.

Haiku.- tanto escribir

                  para hacerte leer,

                  pues te AMO nube.