Propuesta para “Analizar el Discurso” en Politing: Una, no es ninguna

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“Cuanto más conservadoras son los ideas,

más revolucionarios son sus discursos”. Oscar Wilde

Se ofrecerá una visión general para que todo gerente de Politing conozca las metodologías más comúnmente utilizadas y generalmente aceptadas sobre “Análisis del Discurso- AD”, sin profundizar en sus enfoques, pues hay expertos en este campo,

El “AD”, es una metodología cualitativa cuyo objetivo consiste en establecer el contenido semántico de los conceptos correspondiente a los términos utilizados en determinados textos y cuyo análisis se considera interesante para una determinada finalidad. Se propone explicar -respecto de cada término- de qué modo el habla construye su contenido o significación en función del uso de tales términos en el contexto en el que aparecen.

La materia prima para el AD, es, entonces, lo efectivamente dicho, dejando de lado la historia de las ideas, la cultura y intuición o erudición del analista. Para ello, se utiliza la normalización, la segmentación, la elaboración de definiciones contextuales y el armado de redes conceptuales y contrastantes.

Mediante la normalización se separa -en el texto de estudio- los términos añadidos y se eliminan las expresiones consideradas improcedentes de acuerdo con la interpretación del analista. Con la segmentación se dispone de las partes del texto que se consideran de interés por contener el término o expresión cuyo significado -tal como lo construye el candidato o el autor del texto en estudio- interesa establecer. Si se trata de identificar cuáles son los significados que adquieren determinadas palabras utilizadas por el candidato en función del contexto en que las ha utilizado, se recurre a las “definiciones contextuales”, aquellas, mediante las cuales se establece el sentido que adquiere un término, frase o expresión cualquiera, presente en determinado segmento textual completo, en función del contexto en el que dicho término aparece incluido. El siguiente paso consiste en identificar los ejes conceptuales ordenadores según los cuales pueden agruparse las definiciones obtenidas. Los conjuntos así constituidos son representativos de los distintos modos de atribuir significado a los correspondientes términos, por parte de la comunidad o sector social que produjo los discursos en estudio.

Este método permite identificar los ejes según los cuales distintos sectores de la comunidad confieren distinto significado a los mismos términos. Se puede continuar estableciendo sub-ejes, en función de la profundidad de los objetivos que se tengan. Una nueva lectura de los sub-ejes encontrados en cada eje, permite reconstruir un árbol semántico de las significaciones del lenguaje del sector de la comunidad, lo cual va configurando el universo de valores y conceptos en la comunidad a la que pertenece quien habla o escribe y permite conocer las formas del lenguaje con las que lo construye.

Una variante es el Análisis crítico del discurso (ACD) que se ubica en una perspectiva social, política y crítica, enfocada a la manera como el discurso se usa para establecer, legitimar o ejercer el poder y la dominación. Se interesa sobre todo por el análisis del racismo, sexismo, clasismo y la pobreza y se relaciona con movimientos sociales como el feminismo, el pacifismo, el ecologismo, la antiglobalización, etc. El ACD recurre a los métodos más adecuados para el planteamiento y análisis de los problemas sociales que son su objetivo principal. Sin embargo, se basan en la hipótesis de que existe una simetría entre la producción y la interpretación del discurso. Así, un eventual destinatario del discurso político lo va a interpretar según los hábitos que tiene de producir su propio discurso. Desde esta perspectiva, no interesa tanto lo que se dice, sino el modo como lo dice; ni importa tanto decir lo que desea escuchar, sino decírselo del modo como lo quiere escuchar, que es el modo como él mismo lo utiliza.

Este método –que trasciende el análisis político- es un instrumento para comprender cómo se producen los contenidos en los fenómenos sociales. El esquema debe ser coherente con la hipótesis inicial: si se conoce cómo determinado sector de la sociedad produce su discurso, podrá saberse cómo comunicarse con él, de modo que interprete lo que se le dice tal como el emisor desea ser interpretado. Implica que el receptor-destinatario se identifique con las propuestas que se le formulan, al escucharlas, dichas en su propio lenguaje.

Las aplicaciones del AD, son todas las áreas: los medios de comunicación, para estudiar sus efectos; la educación, para conocer los textos escolares y la interacción en el aula; la salud, para los análisis de trastornos del lenguaje y de la comunicación y en la publicidad, la propaganda política y en el Politing.

Gracias a estos Análisis del Discurso -AD, algunos candidatos logaron descubrir que cuando les decían que eran más tercos que “solípedos infecundos”, los estaban comparando con mulas de carga.