Al menos en Tabasco, en las votaciones del domingo 6 se registraron escenarios aparentemente inéditos que deben considerarse en comicios por venir. ¿Por qué la diferencia en votos fue tan abrumadora a favor del partido en el gobierno si en elecciones intermedias por lo general la gente sufraga en contra del “establishment”?
Aquí algunos puntos sobre los resultados electorales que aún siguen siendo materia de discusión en la clase política:
1.- Si eres exgobernador y buscas la alcaldía de la capital del estado, pero el mandatario estatal te dice que pasarán muchos años para que un ex edil gane las elecciones intermedias durante “su” mandato, créele y mejor hazte a un lado.
Por cierto, en días pasados el periodista Felipe Eladio reseñó una comida que habrían tenido algunos actores políticos, entre estos el jefe del Ejecutivo, Adán Augusto López Obrador y el priísta Andrés Granier Melo, poco antes de iniciada la jornada electoral de este año.
En la pieza periodística, que el autor califica de “celada” al químico, se narra que un comunicador allegado al mandamás le preguntó a quemarropa al papá de Fabián si era cierto que andaba en precampaña por la alcaldía de Centro, terciando el gobernador que a él Granier le había dicho, cuando le pidió que el poder Judicial se desistiera de las acusaciones que lo mantenían en la cárcel, que quería quedar libre para estar con sus nietos, no para regresar a la política.
2.- Es mejor ser honesto que ampliamente conocido. Un argumento que fue demolido en los pasados comicios fue que resulta falso que la gente no vote por un candidato si no lo conoce. Tal fue el caso de Yolanda Osuna Huerta, quien era desacreditada por sus adversarios por ser “una completa desconocida”.
Pero el partido de esa “desconocida” le aventajó casi tres a uno al abanderado más mediático y que hizo la “mejor” campaña.
La fama de honesta de Osuna, acoplada al poder del lopezobradorismo hecho gobierno, logró más que el ducho equipo de marketing político y redes sociales del priísta.
3.- El 6 de junio se destaparon actores que antes habían destacado solo en su faceta de operadores políticos: Jaime Lastra Bastar demostró que no nada más ha sido eficiente en su paso por las altas esferas de la administración, sino que también se sabe enfundar en el ropaje de candidato capaz de estremecer masas con su discurso.
Más aún: al exfiscal se le recordará por haber sido el único abanderado que se atrevió a trasmitir en vivo sus actos de campaña, exponiéndose al rechazo ciudadano.
4.- Pese a que la investidura de diputado es la más desacreditada por lo sociedad, según encuestas conocidas, en el Edén se ha demostrado que si haces un papel medianamente destacado y le cumples a los habitantes de tu distrito, vuelven a confiar en ti.
Manuel Rodríguez González y Rafael Elías Sánchez Cabrales, en lo federal y lo local, se reeligieron con un apoyo social que desmiente la tesis de que diputados y policías son los personajes más repudiados por la comunidad.
5.- Los cacicazgos regionales no duran 100 años cuando el poder público se manifiesta con crudeza: ni con todo el dinero del mundo, los candidatos a alcaldes del PRD y del PVEM en Jonuta y Emiliano Zapata, respectivamente, pudieron convencer a los habitantes de esos pueblos pobres, pese a los billetes constantes y sonantes y a las despensas de frijol con gorgojo.
En síntesis, operación política “mata” dinero y “popularidad”.
@RodulfoReyes