Jesús Romero-Trillo
La película “Summer of Soul” es un excelente documental que nos traslada a Estados Unidos en los momentos álgidos de lucha por los derechos de la población negra. El filme resume los seis conciertos que se celebraron en 1969 en un parque de Harlem (Nueva York) con artistas de renombre como StevieWonder, Nina Simone, BB King, entre otros, e incluye la intervención del Reverendo Jesse Jackson dirigiéndose a los asistentes. Los testimonios de algunos de los músicos y de los participantesrevelan la importancia de aquellos conciertos en la historia de la música y de la sociedad norteamericana en su conjunto.
El “Harlem Cultural Festival” se convirtió en una fiesta popular en comparación con otros conciertos memorables de la época, como Woodstock. Aquel festival supuso el encuentro de familias enteras que llevaban su comida al concierto entremezcladas con jóvenes que sufrían la marginación y con ancianos que no vivían “el sueño americano”. La desesperanza marcaba aquellos años marcados por la crueldad y el sinsentido de la guerra de Vietnam, unidos al desvanecimiento de la esperanza tras los asesinatos de John F. Kennedy, Martin Luther King y Malcolm X.
La cuestión de fondo que planea sobre toda la película es la reformulaciónde la identidad negra en la que destaca la entrevista a la periodista del New York Times Charlayne Hunter-Gault, quienconsiguió que el término peyorativo “Negro” dejara de utilizarse en el periódico para dar paso al adjetivo “Black”, demostrando una vez más cómo el lenguaje refleja y articula el cambio social.
No siempre es fácilrepresentar las identidades colectivas en momentos de cambio. La cantante Marilyn McCoo, del mítico grupo “5th Dimension”, relata en primera persona la marginación que sufrieroncuando les acusaban de no ser “suficientemente negros” y de tener un “sonido blanco”.Ella respondió a las críticas diciendo: “¿Cómo se da color al sonido?”
Estamos asistiendo a un cambio de época caracterizadopor tres fenómenos principalmente: la pandemia del Covid-19, la crisis climática, y el éxodo de los refugiados.Ante la complejidad de los problemas, se ha demostrado que los modelos rígidos en “blanco y negro” del pasado, frecuentemente acompañados de la frase “siempre se ha hecho así”, ya no funcionan. Los sonidos del momento actual tienen muchos colores y para describirlos hay que usar nuevas palabras.
Catedrático de Filología Inglesa en la UAM
Publicado originalmente en elimparcial.es