Seguimos entonces inmersos en el tema “Operaciones de Paz”; antes recordemos que, en las dos anteriores tenidas tratamos este mismo asunto.
Luego de leídos y analizados los documentos que sirven de base para el desarrollo de lo que ahora tratamos nos ha quedado por sabido cuáles son los criterios que el Estado Mexicano usa para responder a tales situaciones; demos ahora otro giro a las tuercas.
Antes de meternos de lleno a la exposición (que Fibronio Limón repartió en tres partes) quiero recordar que, en anterior Patrullamiento metí en la canasta de ideas el nombre de Matías Romero y ahora pienso, ya leída la reacción de aquellos, que a mis pares en la mesa les llegó el mensaje.
Ahora entremos a una de las opiniones que este tema ha provocado.
No sobra recordar que el sargento Limón, con formas profesionales, desarrolla un tema de enorme interés para la Seguridad de nuestro país y que, acá en el Think Tank, al brincar una opinión detenemos la discusión para dar acceso a esa.
En este entendido, ahora que ha llegado una opinión sobre los Patrullamientos anteriores detenemos el siguiente apunte de Limón para leer la opinión que Osman Galo Wilson, propietario de una de las sillas en las cabeceras de la mesa, expresa en un extenso texto.
-Muy bien compañeros de la mesa, suscribo a pie juntillas los apuntes del sargento Limón y si, el Estado Mexicano siempre rehusó a participar en las operaciones de paz, pero eso tuvo más que ver con la indefinición del mismo Estado Mexicano en nuestra política exterior para participar militar y policialmente en acciones en el extranjero,- Osman puntualiza diciendo- por cierto, en el actual Gobierno se dice que la mejor política exterior es la interior; -sonrisas serias(sic) brotan en los rostros de los presentes y seguimos escuchando -así que México no va, porque los políticos no quieren- dice Galo; -ellos -los actores políticos referidos -son los que tienen miedo de lo que podría pasar- Galo Wilson se detiene para dejar que sus ideas se entiendan-
– me refiero -dice -al hecho de que siempre a los mexicanos se les ha hecho creer que son un país débil y pobre y por eso se escudan en una política exterior miedosa, pusilánime. -Galo agrega -Los políticos creen – eleva la voz -que porque los mexicanos “respetan” a los demás países los van a “respetar” entendido como que, no los van a agredir, pero no hay nada más falso; el día que un país tenga verdaderamente interés en atacar, lo va a hacer sin pensarlo y en ese momento quiero ver al “soldado en cada hijo” que tiene esa patria sin unas fuerzas armadas preparadas y equipadas – aunque el tema era álgido Galo Wilson no escondía ni una letra; -todos los del Think Tank estábamos ya en la sintonía de Galo Wilson; él continuó en su exposición.
-Como nunca se ha querido gastar en eso, porque somos pobres y hay otras prioridades (se leyó sarcasmo en las palabras de Galo), nunca seremos un país fuerte, así seguirá dándose mientras siga esa clase de pensamiento entre los políticos-.
Osman Galo entendió que tenía una audiencia más que receptivos, por ello, ahondó en su exposición.
-Si mandar contingentes menores a 10 o 20 elementos, todos de jerarquía de jefe y/o oficiales, es participar, entonces sí hemos participado- Galo hablaba ya sin pensar en que lo escuchábamos, es decir, su mente saltó las cercas, … y siguió y siguió.
-Pero esos elementos difícilmente podrían haber tenido una participación activa, (no creo que hayan ido con su arma personal y sus propios cartuchos) pues siempre se ha ido como observadores-.
Galo usa voz fría para decir -Insisto en que son los políticos los que tienen miedo de que las Fuerzas Armadas mexicanas participen realmente, porque enviar un verdadero contingente, cuesta dinero de arranque, aunque después lo devuelvan- el sargento Limón regresa al ritmo de voz académica para decir
-Si aceptan que México envíe tropas a desarrollar Misiones de Paz, Se quedarían (aquellos Políticos de los que hablamos) sin la bandera de que este país es pobre; aunque en realidad hay países más pobres que si mandan tropas, porque les conviene-.
Otro argumento de los políticos existe manifiesto- apunta Galo -, en el sentido de qué México iría (si sacaba tropas) contra la política exterior mexicana.
Y luego viene la situación de soberanía- Galo Wilson parecía harto emocionado y seguía hablando: -el contingente armado mexicano que asistiera a una operación de paz, tendría que quedar subordinado a un comandante extranjero y eso tampoco les gusta a esos políticos, meramente por política.
Osman Galo Wilson realmente estaba dictando academia y por si no fuese lo suficientemente claro concluye su opinión subiendo a atmósferas cuasi/filosóficas diciendo.
-Desde mi punto de vista, la primera gran operación de paz que hubo, fue la invasión de Normandía ello en el ataque de los aliados en la Segunda Guerra Mundial, donde los contingentes de diversos países aportaban recursos humanos y materiales y quedaban bajo las órdenes, en muchas ocasiones, de comandantes que no eran de su país- Las testas que rodeaban la mesa asintieron; Galo entonces concluyó
-Y una apreciación muy personal- dijo Osman Galo y con eso los que lo escuchábamos esperamos el cierre -tal vez los políticos mexicanos no quieren que sus militares vayan a Misiones de Paz porque ellos, los soldados de este país podrían darse cuenta de que son, como militares, tanto o más capaces que cualquier ejército del mundo y eso podría dar un empuje interno para el desarrollo, aunque siempre se requiere la participación política, Vía recursos presupuestales. Dice el dicho -remata con sentido del humor. -con dinero baila el perro-.
Concluido el apunte que Osman Galo Wilson hace al tema que el sargento Limón trajo al Tanque de Ideas, regresamos a las notas del sargento…q
Último patrullaje. – Oaxaca está por convertirse en una de las plataformas industriales más importantes del mundo.
Balazo al aire. – datos bizarros pero ciertos.
Greguería. – “el cumplimiento de la misión” es, para un militar, la única partitura que ejecutará en el concierto de su vida profesional.
Oxímoron. – mentir con la verdad.
Haikú. – cuidar a mamá
es atender a Dios.
Un poco ser ángel.