El estado de Oaxaca, siempre a la vanguardia en el respeto a los derechos de los pueblos originarios, innova rumbo a la sucesión de la gubernatura a través de una figura jurídica que se implementa por primera vez: La candidatura independiente indígena y afromexicana.
Se trata de una acción afirmativa que el Consejo General del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) estableció en los lineamientos para las candidaturas independientes a los distintos cargos de elección popular locales, incluida la gubernatura.
Y para la gubernatura se implementa por primera vez para la sucesión 2022, cuyo proceso electoral está en plena marcha.
En general, la acción es un acto de justicia para las comunidades, pueblos indígenas y afromexicanas en una entidad como Oaxaca con población mayoritaria originaria. Imagínense, de sus 570 municipios, 417 se rigen electoralmente por sistemas normativos indígenas; y en el territorio estatal existen más de 16 etnias. Muchas naciones.
La candidatura independiente indígena participa en el mismo procedimiento para las candidaturas independientes (occidentales por llamarle de algún modo), la diferencia o la particularidad se encuentra en la forma de obtener el respaldo ciudadano.
Para la candidatura independiente indígena, las personas que pretendan obtener el registro mediante esta figura solamente necesitan el aval de una o más asambleas comunitarias.
Los lineamientos en la materia, la definen así: “Las candidaturas independientes relativas a las comunidades, pueblos indígenas y afromexicanas, son aquellas en donde la persona aspirante es postulada por la asamblea general comunitaria de su comunidad a un cargo de elección popular”.
O sea, no necesitan recabar el apoyo ciudadano consistente en las firmas del equivalente al 2% de la lista nominal de electores de la entidad en por lo menos 13 distritos electorales locales que se exige para las candidaturas independientes occidentales.
¡Extraordinario!, ¿no?, pues la referida innovación, flexibilidad o acción afirmativa, permite que personas de pueblos y comunidades indígenas y afromexicana puedan hacer posible su aspiración de participar como candidatos o candidatas por la vía independiente.
La asamblea o las asambleas –no hay un número específico a cumplir— deben celebrarse en el mismo plazo que tienen las candidaturas independientes occidentales para realizar los actos tendentes a recabar el porcentaje de apoyo ciudadano, que para el proceso electoral en marcha va del 13 de diciembre de 2021 al 10 de febrero de 2022.
Pero antes también deben avisar su intención al IEEPCO, para lo cual el periodo ya está corriendo: Empezó el 7 de septiembre y concluye el 12 de diciembre del año en curso.
Y miren, algo importante: Conforme a los lineamientos de la materia, una de las etapas del proceso de postulación de las candidaturas independientes relativas a las comunidades, pueblos indígenas y afromexicanas es precisamente “la asamblea general comunitaria, de agencias, núcleos agrarios o espacios tradicionales de tomas de decisión”.
Una etapa que da amplia posibilidad para obtener el respaldo ciudadano consistente en el aval de la asamblea, y que no la limita a un solo espacio tradicional de toma de decisiones. Es más, ni siquiera se exige haber nacido en la comunidad que dé el aval, sino que ésta reconozca plenamente a la persona para efectos del respaldo a la candidatura.
Lo que sí, evidentemente, el Consejo General del IEEPCO verificará el procedimiento.
El único pero, que es el mismo para todo tipo de candidaturas independientes, son los engorrosos procedimientos como, por ejemplo, la conformación de una asociación civil con la correspondiente alta en el SAT. Además de las limitantes del financiamiento público para el periodo de la campaña electoral.
Pero de que en Oaxaca hay una puerta abierta más accesible para la participación indígena y afromexicana a la gubernatura de Oaxaca por la vía independiente específica, la hay.
Ahora falta ver cuántas personas se apuntan.
¿SE APUNTARÍAN MILITANTES DE PARTIDOS?
La pregunta es si militantes de partidos políticos podrían irse por la vía independiente indígena para obtener la candidatura a la gubernatura de Oaxaca.
Pues al parecer no existe restricción legal, ningún requisito que exija no ser militante de partido político para poder participar por la vía de la candidatura independiente indígena.
El problema estaría quizá en el cumplimiento del principal requisito: El aval de la asamblea comunitaria.
Además, los tiempos de los procesos internos de los partidos políticos prácticamente se traslapan con los plazos para la figura independiente indígena.
Quizá los plazos representan el candado puesto por el IEEPCO para evitar que se pervierta la candidatura independiente indígena por parte de militantes partidistas.
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