“Nunca he visto a nadie doblarse así”, señaló Trump refiriéndose al comportamiento de Marcelo Ebrard en las negociaciones sobre migración en Estados Unidos. Caray cómo me acordé del finísimo Paco Taibo con eso de la “doblada”.
El ex presidente de Estados Unidos reveló que ante la amenaza que hizo a México de imponer aranceles del 25 por ciento, el gobierno de AMLO aceptó desplegar 28 mil soldados para frenar el avance de las caravanas de migrantes usando a la Guardia Nacional como escudo humano en la frontera sur.
En un mitin en Ohio, el Trump recordó una visita que le hizo “el máximo representante de México”, y relató que el funcionario con el que habló, sin mencionar directamente a Ebrard, “entró y se ríe de mí cuando le digo: ‘Necesitamos 28 mil soldados en la frontera, gratis’. Él me miró y me replicó ‘¿Gratis?’ ‘¿Por qué haríamos eso en México?’ Le dije: ‘necesitamos algo llamado ‘Quédate en México'”.
Más tarde lo condicionó a que tenía desde las 13:00 horas de ese viernes hasta las 08:00 horas del lunes siguiente para atender su petición, si no, comenzaría a cobrar aranceles de hasta el 25 por ciento en las importaciones de autos y productos. Entonces el funcionario de la 4aT respondió: “¡Señor: sería un honor tener 28 mil soldados en la frontera! ¡Sería un honor tener ‘Quédate en México’! ¡Queremos tener ‘Quédate en México!’”.
Sin embargo, el gobierno decidió hacer un festival en Tijuana desbordando aplausos por el éxito. Claudia Sheinbaum se veía radiante y el perdona vidas como siempre, Marcelo Ebrard, enfático diciendo “misión cumplida, señor presidente”.
Arrastraron a la vergüenza al expresidente del CCE, Carlos Salazar. Escribí y confirmó ahora que Trump no tiene amigos tiene adversarios. Engañó a AMLO haciéndolo sentir que eran amigos y lo uso, grave error al aceptar, para sumar a los latinos a su campaña de reelección.
Ebrard abiertamente operó equivocándose al forzar la salida de una extraordinaria embajadora como Marta Bárcena para imponer a un improvisado Esteban Moctezuma sin experiencia diplomática y dar la espalda a Joe Biden y a la comunidad de migrantes cuando se dio la visita a la Casa Blanca.
AMLO y Ebrard menospreciaron a quienes mantienen parte de nuestra economía con el envío de remesas, aunque aquí en su estrado el tabasqueño se luce presumiendo el dinero que su administración no genera. Históricamente dos mandatarios en su gestión han hecho temblar al sistema político mexicano: Fidel Castro con el “comes y te vas” y ahora Trump evidenciando a un gobierno sumiso y mentiroso y a un canciller incompetente como ha ocurrido al meter en conflicto a México con Panamá, El Vaticano, Austria, Estados Unidos y España al tiempo de aliarse con Evo Morales, Vladimir Putin, Nicolás Maduro y Miguel Díaz Canel. AMLO es el responsable, el que decide, pero por conveniencia Ebrard es el que opera y cumple órdenes.
Nos han engañado nuevamente y esto pretendería hacer creer que la salida de Ebrard tendría que ser inminente. Ya los errores y las pifias lo superaron y todo por servir a su patrón, ni a México. De mantenerse en el cargo será como Sheinbaum un lastre que los aleja del 24.
Conductor del programa VaEnSerio mexiquense tv canal 34.2 izzi 135
@cramospadilla