¡Por favor! Circula una tamaña tontería diciendo que quieren quitar a Alito para romper la alianza frankeinsteniana. Por favor, por favor, por favor. Si se largara Alito será por maleta y por el tufo de corrupción que lo persigue. Nada más. Y a la Alianza no le fue bien el 5 de junio. Punto.
Lo mismo eso de querer quitarlo para que suceda lo otro se desmiente, cuando el impresentable Cortés dice que esa alianza la firmaron instituciones, minimizando a las personas firmantes y, por otro lado, lo que sí es importante: mantener esa mentira sería como exculpar al PRI negando que carece de propuesta y de capacidad de gobierno, causas directas de su derrota estrepitosa del 5 de junio, como marcaron las urnas, echándolo de unas gubernaturas e impidiéndole llegar a otras. Punto.
Decir que son los otros los no quieren a Alito, es mentir, ya que los propios tampoco lo quieren. Los opositores al PRI ¡claro que sí quieren que se quede! ¿de dónde sacan los extraviados priistas de que no? sí lo quieren. Va tan mal que eso ayuda a hundir al PRI y a que avance la oposición al PRI. Criaturas, despabílense y dejen de decir zarandajas. ¿Cómo no lo van a querer y su permanencia? Menos politiquería y más cerebro en los análisis, evitando así confundir a la opinión pública. Alito que se quede. Quién mejor que él para ser un sepulturero del PRI. Como Zambrano del PRD. Sí, que se quede. Es como si dijeran que ya nadie quiere a Kenia. Que se quede. Mientras vocifera sandeces en el Congreso, no se entera de que al PAN lo apalearon el 5 de junio.
Con todo y que la realidad es terca, necean con Cortés que sí hay candidato. No sé ve cómo. Son partidos contrapuestos que nunca han funcionado juntos. Y no porque sus místicas –como les gusta esa palabreja a sus miembros – sean tan contrastantes, opuestas, ineludiblemente confrontadas. Unos son muy ladrones y los otros, no tanto; y apuestan a fingir mesura y honradez. Así no se puede. ¿Quién será el candidato que los concilie? Eso hace fácil buscarlo. Lo difícil será satisfacerlos con posturas tan opuestas y mentalidades mediocres increíblemente tasadas, escalonadas, pero reales, después de todo.
Y para colmo, el factótum Señor X ya dijo qué clase de candidato quiere que le construyan, y no son buenas noticias para nadie. Increíblemente hasta parece sensato, aunque como todo lo que hace, estrambótico y desaseado, resulta que lo quiere en celofán; y aquellos tres dirigentes petateros cual meseros o mandaderos, necios mandaderos, acaso tomen nota de lo que el amo que los mangonea les increpa y encarece: candidatos que simbolicen “cambio y novedad”. Sea por Dios, una verdadera cartita a Santa Clós viendo como está el patio. ¿Cambio y novedad con puro cartucho quemado en la triada PRI-PAN-PRD? Y lo complicado: sobre todo saber quién es la novedad, que el cambio sí que se ve imposible.
Al Señor X merece respondérsele que su comanda es tan ridícula como la que más. Recuerda el título de la peli del Viejo Oeste: El Bueno, el Malo y el Feo. Sabemos quién es el feo y el malo, mas… ahora saber quién es el bueno, eso sí está pelón.
Vaya, pues lo que pide saca del juego a Enrique de la Madrid y a Alito y a Cortés y a todos los priistas, que ni se apunten. No son ni cambio ni novedad. A Anaya tampoco, que de cualquier manera no se le ve cerca del Señor X y las ambiciones de Dante Delgado igual quedan fuera, aquellas sean por sí o por interpósita persona, y todos se desinflan. Y es muy sencillo entenderlo.
El señor X con su discurso góspel de buscar esa idea de aquí no se ríe quien no quiere y desde luego, la idea de que todo cabe en un optimismo sin fundamento, genera que el sujeto diga que se le puede ganar a Morena. ¡Uy! eso no es novedad. La ley hoy no favorece partidos como el PRI. Hay democracia. En el 23 y 24, dice. ¿Tal y cómo se le derrotó a Va por México en 2021 y sobre todo, en las estrambóticas alianzas en 2022? Vaya, pues.
Pero el Señor X la pone difícil y más parece que no quisiera ganar: deben presentar propuesta ganadora. Hasta hoy no se oye tal a los opositores a Morena. Empezando por el sujeto aludido, solo insultos. Dice que unidad hay que mostrarla como siempre. Amagar a Movimiento Ciudadano no es búsqueda de unión. Dice que ello requiere de pragmatismo y generosidad de la oposición. ¡Uy! pues eso supondría que ya perdieron. Pedírsela a él y al PRI o PAN, es pedirle sombra a los ríos. Su odio por no verse en el poder, los ciega, no se puede esperar generosidad de su parte. Solo acritud y mala leche, como hasta ahora.
¿Qué lo dice para anteponer “a México” antes que a sus intereses y las ambiciones personales de tantos que quieren la presidencia o se sienten merecedores de ella? se antoja difícil. Muy complicado y esa es la semilla de su fracaso. Y en efecto, la ciudadanía valorará todos los nombres, así que no sea tan entusiasta. Muchos al ver la mano del Señor X le darán la espalda y harán lo correcto. México no necesita un factótum. La frankeinsteniana alianza tiene un problema: es El Señor X y si no quieren entenderlo, no lo hagan. Los votantes, lo están haciendo. El votante al centro, siempre.
