Con la suspensión temporal de la coalición legislativa y electoral anunciada la mañana de este miércoles por el PAN y el PRD, ésta empieza a hacer agua. Aunque el diputado federal y presidente del PRI nacional, Alejandro Moreno Cárdenas (Alito), descarte cualquier riesgo.
No obstante, ¡dicha alianza está a punto de romperse en mil pedazos!
La postura del PAN y del PRD, en su pronunciamiento conjunto, es clara: Suspensión “hasta en tanto el PRI no defina con claridad si habrá de honrar (la) plataforma electoral común de la coalición Va por México que (firmaron los tres partidos) en el 2021 y la moratoria constitucional (de) junio del presente año.”
En concreto: Que la bancada del PRI retire o vote en contra la iniciativa presentada por la diputada priista Yolanda de la Torre para ampliar de 5 a 9 años las tareas la permanencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.
Y este mismo miércoles en conferencia de prensa, Alito dio muestras inequívocas de todo lo contrario al manifestar el respaldo de la bancada del PRI a la iniciativa de Yolanda; iniciativa que Morena y aliados no solo aplaudieron, sino que también hicieron suya y será discutida y aprobada en comisiones el próximo martes 13 de septiembre.
Para el PAN y el PRD dicha iniciativa de reforma constitucional “prolonga la militarización” en la república mexicana.
Y “en 2021 la coalición Va por México se comprometió y firmó frente a la sociedad civil una agenda electoral y legislativa clara para cuidar a (el) país, la democracia, las instituciones, los equilibrios y el Instituto Nacional Electoral, así como evitar la militarización del país.” Además, en junio pasado suscribió la moratoria constitucional, particularmente para (proteger) al INE (e impedir) que continúe la militarización…”
En otras palabras, los tres partidos firmaron compromisos para “ponerle un alto a Morena”, como los mismos líderes del PAN, del PRD y del PRI harto han dicho.
Luego entonces, la postura de Moreno Cárdenas de sostener como bancada del PRI la iniciativa de Yolanda, rompe con tales acuerdos, aun cuando adelante el voto en contra de los priistas a la reforma electoral. Y al romperse los acuerdos, se quebra la alianza.
A menos de que los dirigentes del PAN y del PRD, Marko Cortés Mendoza y Jesús Zambrano Grijalva, respectivamente, disculpen a la bancada priista de ir en contra de uno sus compromisos con relación a la temporalidad de la Guardia Nacional en tareas de seguridad pública.
Ciertamente como lo dice Alejandro Moreno Cárdenas: Haber acordado con el PAN y el PRD una coalición electoral y legislativa, no significa que la bancada del PRI no pueda presentar, impulsar o respaldar iniciativas propias o de cualquier otro grupo parlamentario.
Legalmente, incluso, las coaliciones electorales terminan cuando concluye el proceso electoral para el cual se conformaron; y las coaliciones legislativas solamente han existido fácticamente, salvo se encuentren ya en la normatividad del Poder Legislativo.
Sin embargo, la palabra es la palabra.
En fin.
¿ADIÓS COALICIÓN CON EL PRI?
Si el PAN y el PRD pasan de la suspensión temporal a la suspensión definitiva de la coalición con el PRI, entonces toquen Las Golondrinas al partido tricolor en “Va por México” para las elecciones 2023 a las gubernaturas de Coahuila y el Estado de México y para los comicios concurrentes 2024, cuya joya de la corona es la Presidencia de la República.
Sin coalición opositora, a Morena se le facilitaría el triunfo.
LA IMPUNIDAD DE ALITO
En todo este embrollo político pudiera verse a Morena como el malo de la película. Sin embargo, solamente podría estar aprovechando el Talón de Aquiles del PRI: Su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, a quien se supone investigan las fiscalías de Campeche y General de la República por diversos delitos.
Varios de los supuestos ilícitos se desprendieron de audios y videos dados a conocer por la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, en su programa Martes del Jaguar, mediante audios y videos de Alito. Incluso, en la Cámara de Diputados ya habían iniciado su desafuero.
Por eso la sospecha de panistas, perredistas y de miembros de Movimiento Ciudadano que la iniciativa de la diputada priista Yolanda de la Torre representaba la moneda de cambio para la impunidad de Alito, quien, por cierto, en su conferencia dijo que nada debe y que corra el procedimiento de desafuero.
Dirá ‘misa’, pero el respaldo a la iniciativa proyecta una confirmación de la sospecha.
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