El Frente Amplio por México parece haberse apagado tras la designación de Xóchitl Gálvez Ruiz como su Responsable Nacional. Ella en cambio ha asistido a todo tipo de eventos, incluidos aquellos de los partidos frentistas (PAN-PRI-PRD), pero se evidencia más como virtual candidata presidencial que como titular del cargo político.
¿Y el Frente dónde queda? Es decir, la figura jurídica en la cual se basó el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) para otorgar el registro al Frente “para alcanzar objetivos políticos y sociales compartidos de índole no electoral, mediante acciones y estrategias específicas y comunes.”
Porque si bien la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) permitió los procesos políticos para definir los cargos de Responsable Nacional para la Construcción del Frente Amplio y de titular de la Coordinación para la Defensa de la Transformación, ahora el Frente debería ceñirse a los propósitos como tal, aquellos plasmados en el convenio respectivo.
Aunque tampoco están claros, más bien parecen un rosario de buenas intenciones mareadoras. Por ejemplo, vean:
“El propósito del Frente… consiste en estar por encima de todo esfuerzo individual o aislado para construir un escenario colectivo de la más amplia pluralidad de ideas, pensamientos y acciones, es el establecimiento de rutas de acercamiento a la ciudadanía, a través de la implementación de consultas con órganos plurales, en el que la participación ciudadana sea el eje de formación y construcción de la política, y sea también la vía para la conformación de una agenda que verdaderamente atienda las causas ciudadanas, venciendo un populismo con roses autoritarios y trazos totalitarios que de ninguna forma pueden permear como parte de la vida democrática de México.
“El Frente tiene el propósito de formalizar la coordinación de esfuerzos y la unidad política, aspectos esenciales para lograr un impacto significativo en el ámbito político y social. Al unir apoyos y trabajar en conjunto, podríamos obtener mejores resultados en la defensa de los derechos humanos, la promoción de políticas públicas justas y equitativas, y la construcción de un México más inclusivo y sostenible.
“El Frente pretende actuar como contrapeso a la concentración excesiva de poder, promoviendo una mayor rendición de cuentas por parte de las instituciones y los líderes políticos, con la participación y representación de la ciudadanía…”
Pero no se ve al PAN, al PRI, al PRD, realizando acciones concretas como Frente, cuya Comisión Ejecutiva integran los presidentes de los Comités Ejecutivos Nacionales de los tres partidos y la persona responsable para la construcción del mismo.
En cambio sí se les ve en eventos políticos con matiz proselitista.
Tal vez estén confiados en la generosidad del TEPJF, que autorizó lineamientos para evitar que los actos realizados “como parte del proceso político para definir a quienes podrían ostentar una precandidatura o candidatura vulneren la equidad de la contienda…” Pero estos procesos ya pasaron.
Por cierto, implícitamente el Tribunal permitió fines electorales al Frente al consentir que el proceso político definía precandidaturas o candidaturas.
En fin, si el PAN, el PRI y el PRD acordaron una duración del Frente Amplio por México desde la resolución del INE de otorgamiento del registro hasta diciembre del 2024, es para que estuvieran en acciones permanentes para conseguir los propósitos de este asociación partidista que en realidad se llama “Construcción del Frente Amplio por México”.
Capaz lo dan por terminando anticipadamente, porque en los hechos su único propósito ya fue cumplido: La selección de su virtual candidata presidencial vía la ficción jurídica de Responsable Nacional de la Construcción del Frente, cargo que recayó en Xóchitl Gálvez.
Aunque para efectos electorales, no registrarán a Xóchitl como candidata de este Frente, sino de la coalición que en su momento conformen. La figura de Frente no tiene permitido la postulación de candidaturas.
Tal vez la inversión que implica desplegar una serie de acciones como Frente (por ejemplo consultas ciudadanas para la elaboración de una agenda política y legislativa), tiene a los tres partidos haciendo básicamente en conjunto declaraciones mediáticas en contra del gobernador de Nuevo León, en contra de Morena, y para jalar a Movimiento Ciudadano; además de eventos ex profeso para Xóchilt.
Y desperdician el margen de acción que les da la figura de Frente, salvo que prevean actuar en breve. Pero es un tanto difícil porque ya está en marcha el proceso electoral concurrente con procesos locales, lo cual acapara la atención de los partidos políticos. O tal vez no desperdicien nada en un contexto de ficción que les permite seguir posicionado una candidatura presidencial.
TROPAS EXTRANJERAS EN EL DESFILE
No se vio nada bien la presencia de tropas extranjeras en el desfile militar alusivo al 213 aniversario del inicio de la Independencia de México. Primero porque los asuntos de los mexicanos deben ser exclusivos de éstos, y segundo, porque desata suspicacias en otros Estados Nacionales.
Tal vez haga falta una disposición constitucional o legal que expresamente prohíba la participación de tropas de cualquier país en los desfiles militares de México.