Borrada por el usuario o cancelada por la misma red social, oportunamente desapareció la cuenta de X del ex presidente Vicente Vox Quesada.
Oportunamente para Xóchitl Gálvez Ruiz, precandidata presidencial del PAN-PRI-PRD, cuya coalición se llamará “Fuerza y Corazón por México” (PAN-PRI-PRD); el “Frente Amplio por México” fue otra cosa.
Flaco favor le hacía con su falta de recato político en la red.
Era tiro por viaje con sus mensajes, que en vez de ayudarla daba armas para el golpeteo en contra de ella o elementos aprovechables publicitariamente por opositores.
En este último sentido, por ejemplo, el desafortunado calificativo hacia Mariana Rodríguez, esposa del precandidato presidencial de Movimiento Ciudadano Samuel García, a quien aludió como “dama de compañía” al compartir un post de un usuario de la red social.
En otra época una dama de compañía “era la asistente personal de una reina, princesa o alguna otra dama de familia real” (enciclopedia libre Wikipedia). Pero ahora la frase tiene otra connotación, se usa como eufemismo para referir a una mujer que presta servicios sexuales sobre todo a hombres de alto estatus social. Aunque el significado también tiene que ver en el tono en que se diga, el contexto, etc.
Como sea, no es para menos el enojo de Mariana Rodríguez, la presentación de la queja por parte de Movimiento Ciudadano por violencia política, y la tunda que usuarios de la red social dieron al ex presidente Fox.
La misma Xóchitl rechazó la expresión de su ex jefe. Tenía que fijar postura. Primero porque es mujer y segundo porque nadie deja de vincularla con Vicente Fox en cuyo gabinete presidencial fungió como titular de la Comisión Nacional del Desarrollo Indígena, entonces cosa que él diga o haga en el contexto electoral le afecta como aspirante presidencial, sobre todo porque el ex mandatario la respalda.
Igual Gálvez Ruiz tuvo que rechazar el desafortunado comentario de Fox Quesada cuando sugirió que con ella, de llegar a la Presidencia de la República, desaparecerían los programas sociales, los cuales él considera sirven para sostener a personas sin oficio ni beneficio.
En fin, Fox calladito se ve más bonito. La desaparición de su cuenta en la red social, es una carga menos para Xóchitl Gálvez. Aunque si el ex presidente canceló su cuenta, quizá sea para borrar evidencias de violencia política. Tal vez abra una nueva cuenta.
XÓCHITL TAMPOCO SE AYUDA MUCHO
Independientemente de si cumplen o no requisitos de promocionales para precampaña, los spots de Xóchitl Gálvez no son atractivos, ni para la ciudadanía en general si acaso de manera intencional fuesen dirigidos a ésta. Sobre todo el spot donde se narra su historia.
El panismo lo sabe. El priismo y el perredismo, si no sabían, tuvieron conocimiento en el proceso político en el que anticipadamente fue designada virtual candidata presidencial vía la figura de Responsable Nacional para la Construcción del Frente Amplio por México.
Y la ciudadanía se enteró de refilón. Y si no se enteró, tampoco le importa mucho saber que de niña vendió gelatinas, que salió de su comunidad indígena, que se mudó a la Ciudad de México y que con mucho esfuerzo estudió ingeniería.
La ciudadanía quiere escuchar soluciones a la problemática del país. Soluciones que debe plantear en la etapa de la campaña.
Por ahora debe centrarse en la precampaña. Y si bien no tiene contrincantes internos, debería aprovechar el tiempo para convencer a militantes del PAN, del PRI y del PRD que aún no estén convencidos de su candidatura a la Presidencia de la República.
En el PRI quizá haya militantes todavía decepcionados del proceso político truncado, pues tenían esperanzas de ver a Beatriz Paredes Rangel como la triunfadora, amén de la postura de Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional, de forzarla a declinar porque Xóchitl llevaba ventaja.
A esa militancia debe dirigir la precampaña.
No le vaya a pasar lo mismo que a José Antonio Meade. Parte del priismo no lo respaldó porque nunca lo sintieron su candidato, máxime cuando incorporó a panistas a su campaña.
Vaya, si priistas y panistas no terminan de verse cómo equipo, ni de sentir a Xóchitl como su virtual candidata presidencial, ¿para qué se coaligan? Quizá a estas alturas solo busquen ganar cargos al Congreso de la Unión y cargos populares locales.
Pero si Xóchitl no crece en la preferencia electoral, entonces habría menos probabilidad de producirse el efecto del voto parejo en el resto de las elecciones.
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