El senador Salomón Jara Cruz fue intervenido quirúrgicamente, de manera urgente el lunes de esta semana. Tras conocerse la noticia, mucho se ha especulado sobre el motivo: Infarto, derrame cerebral, embolia, etc. Personas cercanas a él informaron tratarse de un coagulo en una parte de la cabeza.
Su hospitalización ha causado escozor en su natal Oaxaca porque ocurre precisamente en la víspera del inicio del proceso electoral para renovar la gubernatura; arranque previsto para el 1º de septiembre, salvo cambio de última hora para el día cinco.
Y le ocurre al aspirante más fuerte de Morena, lo cual ha generado desasosiego al interior del morenismo oaxaqueño y, en general, cierto ambiente denso en la clase política local.
Afortunadamente, hasta donde se sabe, Jara Cruz se encuentra estable y en recuperación. Y aunque tendrá que guardar reposo absoluto algunos días, su nombre sigue jugando para la sucesión oaxaqueña. El proceso electoral arranca, pero la selección interna de la candidatura será entre finales de noviembre o quizá hasta principios de enero.
Es necesario precisarlo, pues hay quienes luego se frotaron las manos interna y externamente.
Una eventual incapacidad física del senador, en automático lo dejaría fuera de la sucesión; la incapacidad es causa de inelegibilidad. En un supuesto así, Morena tendría que reemplazar a quien ha sido el cuadro con más posibilidades para ganar la gubernatura oaxaqueña de manera contundente.
Así es la condición humana de triste.
Por otra parte, es innegable, la existencia en Morena-Oaxaca de un grupo disidente al del senador Jara Cruz, el cual obviamente, ha venido empujando una candidatura distinta.
Y también existe la probabilidad de que Morena determine postular a una mujer para la gubernatura; probabilidad proyectada, incluso, antes de enfermar Salomón, quien, por cierto, se sintió mal previo a una sesión en la Cámara Alta, fue a la enfermería y ahí le indicaron la urgencia de acudir a un hospital.
Imagínense que se haya sentido mal en plena gira en las alejadas e intrincadas comunidades oaxaqueñas; no la cuenta.
Pero la contará. Jara Cruz trae la fortaleza en su sangre de origen indígena, el ánimo de vivir y el enorme anhelo de convertirse en gobernador de Oaxaca. Quizá el quehacer político ha provocado descuidar su salud. Después del susto, se encuentra estable, dice su gente.
Retomando el tema de la candidatura de género. Ésta ha sido una probabilidad ajena a la repentina intervención quirúrgica de Salomón. No obstante, con dicha eventualidad la ven más factible. Sin embargo, como en toda praxis interna partidista, es cruenta la lucha por la candidatura a la sucesión oaxaqueña y diversos grupos políticos empujan también a otros varones internos y externos.
Como en Oaxaca Morena es marca, piensan que ganará con cualquier candidatura y con cualquier persona. Y es probable, nada más que Jara trae estructura propia; es la diferencia. No obstante, como dice la vox populi, “donde manda capitán no gobierna marinero”. Y claramente el timón lo lleva AMLO.
TODO Y NADA PUEDE SUCEDER
No solo la pandemia Covid-19 representa un riesgo para las personas aspirantes a las gubernaturas a elegirse en 2022 en las entidades de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, sino también las mismas condiciones de cada persona.
Quienes detentan un cargo público, de elección popular o partidista, muchas veces se les olvida checarse médicamente de manera regular. Son seres humanos, no máquinas.
La repentina hospitalización del senador Salomón Jara es un llamado a tiempo tanto para él como para las demás personas que aspiran a la sucesión en su respectivo estado.
Además de los eventos de la naturaleza, en política todo y nada puede suceder en cuestión de segundos. Así que llévensela con calma; incluso, revisen su entorno y sus condiciones de seguridad personal; el crimen organizado acecha.
CAUSAS DE INELEGIBILIDAD
Han sido causas de inelegibilidad a cargos de elección popular: No cumplir con los requisitos constitucionales y legales como, por ejemplo, la nacionalidad, la residencia efectiva, la edad, la separación de otro cargo, no contar con la calidad de elector, etc.
Y también lo son la incapacidad y la inhabilitación.
Más recientemente se ha incorporado la inelegibilidad derivada de violencia política en razón de género, deudor alimentario.
Las personas aspirantes a las gubernaturas 2022 están muy a tiempo de revisar cada una para evitar colocarse en una causa de inelegibilidad, cuando se encuentre en sus manos poder evitarlo. Incluso, los mismos partidos políticos deben analizar a sus cuadros, las condiciones de diversa índole, el entorno.
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