- La confrontación del presidente López Obrador con el periodista Carlos Loret de Mola contaminó el escenario de la sucesión presidencial porque obligó a un realineamiento de alianzas de los principales precandidatos en torno al contenido del debate. La precandidata Claudia Sheinbaum sacó el mejor puntaje porque fue el pivote para un desplegado de apoyo al presidente con la firma de todos los gobernadores de Morena. Ricardo Monreal tuvo que lidiar con el escándalo en su espacio político y Marcelo Ebrard se concentró en su trabajo diplomático.
- En todas las encuestas que se han publicado hasta ahora aparece a la cabeza de la propuesta del PAN a la candidatura presidencial opositora el abanderado de la coalición PAN-PRD en 2018, Ricardo Anaya Cortés, cuyo resultado electoral apenas sumó 22%. El dato revelador se localiza en el operativo judicial para encarcelar a Anaya y evitar su consolidación como candidato de la coalición PRI-PAN-PRD en el 2024.
- El ex presidente de la Coparmex Gustavo de Hoyos ha iniciado una ofensiva política para ocupar espacios en medios de comunicación con artículos que pudieran darle un posicionamiento mediático con miras a su aspiración de ser el candidato presidencial de la coalición PRI-PAN-PRD-Coparmex. En las primeras encuestas de base política, De Hoyos aparece con una tendencia muy baja de simpatías y no existen indicios de que pudiera ser catapultado por el sector empresarial para la candidatura opositora. Y, por si fuera poco, los tres partidos de la coalición opositora han dejado muy claro que el proyecto Sí Por México deberá tener como candidato a alguna figura de militancia político-partidista y nadie que represente al sector empresarial.
- Con suficiente anticipación, algunos analistas están llamando la atención sobre la reconfiguración de la estructura de poder de los cárteles del crimen organizado en toda la República y su papel importante en el proceso de elecciones presidenciales por la influencia territorial y política a través del apoyo a autoridades locales.
- Duró muy poco en el ánimo social la información que señalaba el apoyo de sectores sociales a la precandidatura presidencial del consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello. El propio funcionario electoral se encargó de enfriar la calentura sucesoria por la imposibilidad de los tiempos legales, pero también por el hecho de que su confrontación con el presidente de la República le redujo sus márgenes de maniobra.
- Sectores de la oposición social no partidista andan a la caza de figuras de importancia mediática para proponerlos como candidatos presidenciales. Es el caso, por ejemplo, de Luis Donaldo Colosio Riojas, cuya victoria a la alcaldía de Monterrey fue catapultada por la red de intereses empresariales en el estado y el posicionamiento mediático solo por ser hijo del asesinado candidato presidencial del PRI. El marcado apoyo del sector empresarial autonomista de Monterrey no es una buena carta de recomendación para competir por una candidatura que se dará en el escenario dominado por el enfoque populista de Morena y su tendencia adelantada a la cabeza del Derby.
