Sucesión 2024. Fox y otras 5 equivocaciones opositoras que derivan en necedades

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Tener los opositores a Vicente Fox como buque insignia, dice mucho. Avalan así a quien llamó “lavadoras de dos patas” a las mujeres y recién, “judía búlgara” a la presidenciable Claudia Scheinbaum. Todo un expresidente de México. Tamaña vergüenza cobijada por el PAN,  ha obtenido del PAN el silencio que avala sus disparates. Eso enloda al PAN, que se vuelve padrino de esas palabras del impresentable guanajuatense. Esa es la oposición que niega ser clasista y racista, que se dice ser mejor que Morena y apuesta a 2024. Pues siendo así, cheers! dicho con todo sarcasmo. Y atentos, el antisemitismo de Fox encumbra a  Scheinbaum. Y sus disparates no hacen más honrado al PRI.

Y cabe apuntar: si con xenofobia –o ¿es simple estupidez? y no hay manera de matizar nada– pretende Fox apuntalar a Xóchitl Gálvez, él, de abuelo irlandés y madre española –o sea, que el exmandatario no es precisamente descendiente directo de Tláloc ni lo parieron en la pirámide del Sol – entonces flaco favor le hace a la senadora, lo que es una invitación a mejor callarse, porque ha enlodado brutalmente el nombre de la muy cuestionable candidata. Ya lo de llamar a Ebrard “fifí francés” raya en francofobia. ¿Qué le hizo Napoleón a los antepasados de Fox? vaya traumando y acomplejado que está Fox. Es un desperdicio de capital democrático. Lástima del 2000. El panista Fox nos recuerda lo que fue entre 2000 y 2006: el no saber estar, nunca.

Sirva como inicio a esta reflexión. Esta entrega destaca 5 grandes errores de los opositores, de cara a 2024, acentuados en las últimas semanas. Tales errores propician análisis muy mafufos desde sus simpatizantes, consecuencia de tragarse una mentira tras otra y cinco años después, ya no distinguen la realidad de la ficción. Es grave su situación de opositores “analizando”, ya que la oposición en México es mucha ficción a la hora de jugarle al analista. Tal cual, jugarle, al proponer ficción pura y dura. Ergo, carece de seriedad tantas veces y entrega al colectivo historietas, no historias. En esa tesitura, sus corifeos hacen unas lecturas tan equivocadas de la realidad nacional, mientras endilgan propaganda baratona a su causa de forma abierta o semioculta, da igual, en cada “análisis” tendencioso que formulan; y todo para descubrir que sus sesudas reflexiones se quedan en ficción y de la más malita.

Pues sí, el primer error consiste en que la oposición durante el sexenio que corre ha sido muy paupérrima en su narrativa. Tanto, que al día de hoy ni siquiera puede proponer candidato –¿qué hizo 5 años, además de insultar a López y a Morena? – y ya no digamos que en 5 años se opuso a todo sin haber construido alternativas y soluciones. Eso pasa solo cuando todo se te va en odiar a López. Nadie se toma en serio eso de: “la solución es ver por México” o “construiremos un México del futuro”. Por favor. Esas pavadas opositoras las han dicho todo el tiempo y eso es no proponer algo aterrizado. Para vaguedades sí están y es lo que difunden a sus simpatizantes, que los siguen tan ciegamente. Hoy votar a la oposición solo es regresar a 2018 e implica retroceso.

El segundo error es que están apoyando su campaña proXóchitl Gálvez en sus filias y sus fobias y no en objetividades, y así van queriéndolas disfrazar de análisis que no son y no dan para análisis; y que tantas veces van tan torcidas y mentirosas, con lo cual tales medios que se prestan, se han tenido que tragar sus propias veleidades. Lo mismo el ciudadano de a pie, alimentado con odio a mañana, tarde y noche por esos medios nada éticos, sí opositores y con elocuentes ganas de extraviar a la gente en la mentira, mientras le lanzan una imparable desinformación, irresponsable y falsaria contra todo cuanto suponga Morena o López Obrador, tantas veces sesgada. Hay en el colmo del proceder opositor, la modalidad Vacuna COVID-19: mujeres que se callaron subir foto de la vacuna, no por pudor, si no ya fuera por no parecer agradecidas al presidente a quien detestan o para no revelar edad, como si su proceder importara a los demás. Y no.

En el colmo de difundir notas falsas o de ya embotarse con tantas consumidas, lo mismo una excolega profesora rezongaba diciendo que no es periodista, como para verificar lo que se le comparte en redes; y propalaba todo lo que le cuadraba estupendo como mensaje de odio a López, por ser insultante a López; entonces, lo replicaba sin ética, sin verificarlo, pese a ser una nota falsa. E igual un panista rezongaba que sí, 4 años después espetaba fúrico y frustrado: “no, no somos Cuba (como aseguraban los panistas que lo seríamos bajo López) pero…estamos en vía de serlo”. Desde luego, es una burrada. No digo torpeza, porque puede haber niños leyendo esto. No se puede ser más patético como opositor o, acaso, sí se pueda, que ahí están Alito y Cortés.

Mas los seguidores solo replican lo que oyen a los actores opositores, tal y como si fueran sus mesías. En ese sentido, unos y otros solo van dando tumbos y no es de extrañarnos. Es un ramillete de equivocaciones que es preciso enlistar para exhibirlos y alertar así al lector, cuando se tope con ellos.

Un tercer error: entre las interpretaciones extrañas que involucran a Xóchitl Gálvez, afirman que, en realidad, el Señor X la lanza a ver qué reacción desencadenaba.  Por favor. Que para no ser la candidata preelegida les fastidia mucho a los opositores que se la critiquen –sin importarles si promete ser una entre populista de derecha y simple y triste títere de Claudio X. González– y le dan mucha promoción cada vez que le alcahuetean frasecillas y ocurrencias, afirmando, además, y lo aseguran como si les constara el sentir del Señor X. Pulula el pensamiento mágico y imaginario tropical para encubrirlo como el gran elector. Y lo peor, es que ella no ha movido mayor cosa las preferencias pro PRI y PAN. Ahí está su genialidad opositora. Dicen que crece. Será planta.

Cuarto error: la oposición transita bastante equivocada en su actuar en el proceso de elección de candidato. Primero, por insistir en un solo candidato bajo la premisa de que no ganarían a Morena con otra fórmula. Nada les dice agendas a contrastar ni el actuar de Morena que será evaluado en las urnas. No plantean nada valioso como opositores. Así, está cañón que ganen y no entienden.

Se cierran los opositores a otras opciones y análisis y a no leer realidades. Necean con tener un solo candidato. Pues…para estar tan seguros de que Morena perderá y no ellos de ganar, necean conque necesitan de un solo candidato y que no hay de otra. Respuesta: entonces Morena ni es débil ni tiene todo para perder, como lo aseguran. ¿Qué Morena tiene todo el aparato del Estado, balbucean? qué modestos son los opositores. Hipócritas. Ahí donde gobiernan como opositores también lo tienen ellos y lo ejercen contra Morena, además de contar con otros apoyos y bendiciones como la del Señor X que no es menor o el financiamiento yanqui. Ese nombre, ya no podrán sacudírselo. Dicen tener esperanzas con Gálvez. ¡Ahhh! eso, esperanzas, no certezas ni mucho menos, propuesta o candidato. Ya nos vamos entendiendo, entonces.

En ese errático proceder, se la viven los opositores no proponiendo el bienestar de México, sino haciendo cuentas de puntos de distancia entre candidatos, revolviendo dinámicas electorales estatales con la presidencial. No son lo mismo. Que eso jamás es garantía y lo saben, pero les sirve para contarse un cuento. O sea, tener esperanzas. Igual y si le rezan fuerte, la consigan. También se equivocan en una apreciación recurrente: afirman sin pestañear:  “A López Obrador le preocupa Xóchitl Gálvez”. ¿En serio? dicho ¿por quién?  Ummmm ¿y cómo pueden asegurarlo si le preocupa? ¿por eso lo denuestan? ¿suelen dormir con López Obrador o se interiorizan con él, como para saber lo que afirman? Es que su afirmación parece sensata, pero carece de pruebas, es ridícula. Hablan por alguien sin saber lo que realmente piensa. Solo optan por burdas conjeturas, supuestos, teorías debrayadas. Pues así cualquiera plantea y con asegurarlo se queda tan orondo. Y encima, se creen exquisitos y lo acertados que no son. Chido su análisis.

En esa tesitura, la oposición a Morena vuelve a equivocarse. Está cegada de odio, creyendo que la gente le dará el voto sin más, a cambio de nada, solo por no votar Morena. Así de desesperados y obtusos se comportan los opositores. No aprendieron de Edomex. Ni del sexenio. Es creerse que los electores son estúpidos, ya no tontos. Tienen los electores frente a sí a una oposición que no propone, no se renueva, ni en caras ni en discurso. Se sobajan y a la democracia. Recordemos: en Edomex los panistas no iban a votar Morena, pero se negaron a darle su voto a la corrupta priista Del Moral. Eso mide así y no de otra forma, el panorama de 2024. No es votar lo que sea y lo que sea es Xóchitl Gálvez. Es tan clarito que sorprende que algo tan senciillo no lo quieran entender los opositores.

Quinto error: exaltar a Gálvez. Reiteramos que Xóchitl Gálvez no fue una buena funcionaria y no es una buena candidata. Su desparpajo deja mucho qué desear y es comprobable. Ese sí. Si histrionismo suplanta decirnos el modelo de país que no nos ha podido ofrecer. Es que… o actúa y hace drama o se pone a proponer. No puede ambas cosas. El error se remacha adelantando la oposición a su candidato. Lo lógico hubiera sido que lo hiciera primero Morena y, entonces, según lo hecho, responder. Clarito.